Denzel Washington: "Beber dos botellas de vino al día durante 15 años ha hecho daño a mi cuerpo"
El actor celebra una década sobrio y reflexiona sobre su relación con el alcohol y su nueva etapa de vida.
El actor y ganador de dos Oscar, Denzel Washington, ha confesado en una entrevista para la revista Esquire que lleva un década sin probar una gota de alcohol. Washington, a punto de cumplir los 70 años, tomó la decisión de dejar la bebida cuando tenía 60, después de pasar una etapa de 15 años en la que el consumo de alcohol fue parte de su rutina diaria.
El actor empezó a beber con mayor frecuencia a finales de los años 90. En 1999, incluso, construyó una bodega con capacidad de 10.000 botellas de vino. Aunque nunca se sintió "enganchado" al alcohol, sí admite que el hábito se había vuelto constante. "El vino era lo mío, y al final de esos años pedía a Gil Turner’s Fine Wines & Spirits dos botellas de lo mejor que tuvieran. Mi mujer me decía: ¿Por qué solo dos? Y yo le respondía: Porque si pido más, beberé más. Así que me limitaba a dos botellas y me las bebía durante el día”, confesó el actor, que ha vuelto a las carteleras de medio mundo con Gladiator II.
En la entrevista, Denzel Washington describe cómo lo que al principio era una afición por el vino, evolucionó hasta convertirse en una rutina difícil de romper. "Al principio era algo glamuroso, catas de vino y todo eso. Me decía que no era un problema porque estaba bebiendo lo mejor. Pero esa es una trampa. Me estaba engañando a mí mismo”, explica el actor. Sin embargo, admite que este estilo de vida acabó pasándole factura: “He dañado mi cuerpo en muchos aspectos. Ya veremos qué pasa, pero estoy limpio. En diciembre hará 10 años", asegura el actor.
Desde que dejó el alcohol, Denzel Washington se ha esforzado en llevar un estilo de vida más saludable. Inspirado por su amigo Lenny Kravitz, en 2022 contrató a un entrenador personal y lleva una dieta estricta a rajatabla. "Entrenamos juntos y él me prepara las comidas. Ahora estoy en 86 kilos y algo, pero quiero llegar a los 83. Después de ver mis fotos en la gala de los Oscar en la que me nominaron por Macbeth, con el pelo teñido y algo pasado de peso, pensé: "Esos días se acabaron". Ahora me siento más fuerte", dice.
En la entrevista, el actor también reflexiona sobre la importancia que tiene cuidar la salud a medida que se envejece. "Estoy haciéndolo lo mejor que puedo. Pienso mucho en lo que quiero hacer con los años que me queden de vida. Mi madre llegó a los 97, así que si tengo la suerte de vivir hasta los 90, quiero estar bien para entonces”, dice el intérprete.