La ciencia desvela las habilidades de los hijos únicos
Y compara su desarrollo con los niños que sí tienen hermanos.
Tradicionalmente se ha colgado a los hijos únicos el sambenito de ser más egoístas que los niños que sí tienen hermanos, o que son más caprichosos, pero el tópico está cada vez más en desuso, avalado además por la ciencia.
El Debate se hace eco de un estudio del University College de Londres que concluyó que los hijos únicos no difieren tanto de los que sí tienen hermanos, además de las investigaciones de Susan Newman, psicóloga especializada en hijos únicos. Para esta experta, lo más determinante para el desarrollo es cómo los padres crían a su hijos.
"Otros estudios han desvelado que los hijos únicos suelen tener una relación más positiva con sus padres y menos problemas en el colegio, además de mejores resultados académicos", cita El Debate.
Según publicó Ana Aznar, profesora de Psicología de la Universidad de Winchester en este artículo de The Conversation, "si examinamos el desarrollo de la personalidad, encontramos que no hay diferencias entre personas con y sin hermanos en lo relativo a extroversión, madurez, nivel de cooperación, autonomía, autocontrol o capacidad de liderazgo".
"Los hijos únicos tienden a tener mayor motivación (una medida de aspiración, esfuerzo, y persistencia) y capacidad de adaptación (habilidad para acostumbrarse a nuevas situaciones) que quienes tienen hermanos", agregaba
Como concluía, si se tiene en cuenta que en todo el mundo está aumentando el número de familias con un solo hijo, "igual ha llegado el momento de dejar de estigmatizar a los hijos únicos": "Los hijos únicos parece que se desarrollan de una manera totalmente normal, si no mejor, que los que tenemos hermanos".