La receta de las abuelas españolas para el plato perfecto para las tardes frescas de octubre
Se trata de un plato sencillo y nutritivo, que además puedes congelar para tomarlo bien caliente en el momento más apropiado.
Aunque ya hay mucha gente que incorpora en los meses de calor las legumbres en su dieta, por ejemplo, en ensaladas, es la llegada del otoño lo que más invita a empezar a prepara los platos tradicionales de sopa o de legumbres.
En octubre, una de las primeras legumbres a las que podemos recurrir, como siempre han hecho nuestras abuelas, son las lentejas, ideales para calentarse con la llegada de los primeros días frescos y también muy saciantes.
Las lentejas siempre han sido muy apreciadas por su valor nutricional, combinan, además, maravillosamente con ingredientes de temporada como, por ejemplo, los champiñones determinadas hierbas, lo que hace que esta sopa sea ideal para una cena en esta esta estación del año.
Una idea de receta para estos días es la tradicional sopa campesina de toda la vida. Es sencilla de hacer y sus ingredientes son fáciles de conseguir. Si la vamos a hacer, por ejemplo, para cuatro personas, tenemos que calcular que el plato nos aportará aproximadamente unas 280 Kcal por ración.
Para hacerlo sólo necesitamos lentejas rojas (130 gramos), champiñones (400 gramos), cebolla dorada (40 gramos) y zanahorias (50 gramos). Además, con condimentos, debemos tener a mano un diente de ajo, una hoja de laurel, perejil picado (que echaremos al gusto), sal y pimienta (también al gusto). Completamos los ingredientes con dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra y un litro de agua.
El tiempo de preparación de estos ingredientes te puede llevar, si es la primera vez que haces la receta, como mucho 15 minutos. Y tienes que pensar que el de cocción va a ser de unos 25 o 30 minutos.
La forma de preparar los ingredientes es picando la cebolla y la zanahoria, que metes después en una cacerola en la has puestos las dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra y el diente de ajo entero. Y fríes estos ingredientes en el aceite, revolviéndolos a menudo con una cuchara, durante cinco minutos, siempre a fuego lento.
Mientras, limpias los champiñones, los cortas en rodajas y luego los añades a la salsa que estás preparando en la cazuela. Y los dejas cocinas tapados durante otros cinco minutos.
Después ya sólo te queda agregar las lentejas. Las añades junto al litro de agua y tapas la cazuela para que se cocine a fuego medio durante unos 20 minutos. Acuérdate de que también tienes que estar revolviendo de vez en cuando el guiso con la cuchara, idealmente de madera. Si ves que el líquido se reduce demasiado, no dudes en añadirle un poco más de agua, pero échala ya caliente.
Ya sólo te queda sazonar el guiso con sal y pimienta al gusto y echarle perejil fresco picado justo antes de servirlo, como decoración y para darle el toque final de gusto al plato. Cuando lo sirvas, hazlo como muchas de nuestras abuelas, añadiéndole picatostes, que te recomendamos que ofrezcas a los comensales en un cuenco aparte para que se los pongan la cantidad que les apetezca. Esto hará el plato aún más completo y saciante.
Que sepas que este plato lo puedes conservar en el frigorífico durante dos días y se mantendrá igual de rico. Aunque también puedes congelarlo para esas tardes en las que no te da tiempo a cocinar y empieza a enfriar y os apetece tomar algo caliente, pero que sea casero y nutritivo.
