Francia tira por tierra la mandarina española
Un nuevo episodio en la 'batalla' del campo galo contra el campo español.
Las peleas de Francia con la fruta española vienen de lejos. También en 2024 se han vivido momentos de tensión por parte de agricultores y transportistas galos bloqueando y hasta agrediendo a los españoles cuando cruzaban el país con destino a otros puntos de Europa.
La batalla también llega a los medios. La publicación francesa especializada en alimentación Marmiton asegura que algunos de los cítricos más consumidos en esta época, las clementinas y mandarinas, presentan notables diferencias entre Francia y España. Las dos grandes variedades en el mercado, añade.
Para este portal, la clementina de Córcega es la única que tiene una IGP (Indicación Geográfica Protegida), lo que obliga a los productores a seguir criterios estrictos, como la recogida a mano en su punto de madurez, sin poder someter la fruta a ningún tratamiento.
Esta selección cuidada permite que se logre un fruto "muy poco dulce y deliciosamente ácido", prosigue el medio, que lo contrasta con la versión española, que supuestamente recurrentemente sometidas a "operaciones de reverdecimiento".
Se trata, siempre según este medio, que no presenta pruebas, de movimientos con un único "interés estético", con un tratamiento artificial que iría en contra de la frescura de la fruta.
Así, destaca que hay una diferencia notable en el precio de venta. Si la variedad corsa ronda los 5 euros por kilo, en el caso de la clementina española se mueve en torno a los 3 euros/kilo.