Ayuso reabre el debate sobre si jornada partida o continua: qué piensan padres y profesores

Ayuso reabre el debate sobre si jornada partida o continua: qué piensan padres y profesores

La presidenta regional promoverá la partida en Madrid pese a que el 80% de los colegios públicos aplican el horario continuo.

Ayuso escribe una dedicatoria en una cartulina, este lunes durante el inicio del curso escolar en el Colegio Daoiz y Velarde de Alcobendas, MadridEFE

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, sorprendió este jueves durante su intervención en el Debate sobre el Estado de la Región al anunciar que los nuevos colegios públicos que abran en la Comunidad estarán obligados a implantar la jornada partida en detrimento de la continua tanto en Infantil como en Primaria, además de integrar los dos primeros cursos de la ESO en sus centros. Igualmente, para el resto de colegios que ya están abiertos, "se promoverá" extender este nuevo régimen horario con el fin de "combatir el abandono escolar, mejorar el rendimiento, los hábitos de alimentación de los alumnos, combatir la soledad, las adicciones, las bandas y las drogas".

Según cifras de la consejería de Educación, el 80% de los centros madrileños tiene actualmente la jornada continua, una cifra alta que está, incluso, por debajo de la registrada en la mayoría de regiones españolas. En Canarias, Extremadura, Baleares, La Rioja y Castilla - La Mancha es del 100%, y en Andalucía y Cantabria, del 98%. 

  Varios alumnos, durante una claseGetty Images/Image Source

El debate sobre si es mejor para los alumnos tener clases mañana y tarde o sólo durante la primera franja del día ha sido una constante en muchos claustros y reuniones de padres. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó hace un año un informe apoyando la jornada partida para reducir el abandono escolar prematuro en España –en 2023 la tasa era del 13,6%, lejos del 9,5% de la UE–.

El mismo documento detallaba que se había demostrado que "pasar más tiempo en el centro educativo permite elevar las tasas de graduación y mejorar el aprendizaje y otros indicadores sociales y conductuales", además de ser una herramienta eficaz para proteger a "los alumnos más desfavorecidos". 

Por ese motivo, la OCDE instaba a España a seguir el ejemplo de otro países de la UE, como Dinamarca y Portugal, y pasar a la jornada completa en los centros educativos, decisión siempre acompañada de una mayor inversión en comedores y actividades extraescolares.

  Un modelo de jornada continua y otra de partida en la Comunidad de MadridAMPA

Además de los beneficios para los alumnos, otros estudios apuntan a que la jornada continua provoca distorsiones en los biorritmos de los niños por los horarios de la alimentación, así como una "brecha de género" debido a que "algunas madres no pueden compatibilizar un trabajo con la salida de sus hijos" a las dos de la tarde. Así lo señalaba, por ejemplo, un informe de ESADE publicado por tres autores en 2022, que también precisa que "existe una evidencia abundante sobre cómo el tiempo que un menor permanece en la escuela supone un impacto positivo en los alumnos, tanto en términos académicos como socioemocionales".

Otra investigación liderada por Daniel Gabaldón, sociólogo especializado en educación de la Universidad de Valencia, detalla que la jornada intensiva en los centros educativos hace que los alumnos descansen y coman peor, hagan más deberes, dediquen más tiempo a las pantallas y les obliga a madrugar en exceso.

Por otro lado, los franceses François Testu, Hubert Montagner o Nicole Devolvé consideran que la atención de los niños es máxima a mediodía, sufre una fuerte caída a final de la mañana -entre las 13.00 y las 15.00- y vuelve a remontar a primera hora de la tarde. De ahí que estos expertos también se muestren a favor del horario partido.

Apoyo de los padres "por el interés superior del menor"

  Niños, en los pasillos de un colegioGetty Images

¿Y qué dicen los padres ante este posible regreso a las clases por la mañana y por la tarde? La FAPA Francisco Giner de los Ríos -que agrupa a un millar de asociaciones de madres y padres de alumnos de la Comunidad de Madrid- ha manifestado su respaldo al anuncio de Ayuso. “Siempre hemos defendido que cualquier medida educativa debe centrarse en priorizar el interés superior del menor. En este sentido, consideramos que más tiempo escolar y mejor distribuido contribuye positivamente al desarrollo integral de los estudiantes, tanto desde el punto de vista académico como en términos de bienestar físico y emocional”, indica en un comunicado.

La FAPA cita un informe publicado por la Comisión Europea, Education and Training Monitor 2021, que apoyaba “las ventajas de contar con tiempos escolares mejor repartidos entre la mañana y la tarde, destacando cómo estos modelos facilitan una mayor retención de la información y una mejor adaptación a los ritmos biológicos de los estudiantes”.

La Federación alega además que la jornada partida “mejora la conciliación de la vida familiar y laboral para la mayoría de las familias” y que “contribuye a evitar que los jóvenes, especialmente en las primeras etapas de la adolescencia queden desatendidos en las tardes”.

Los sindicatos de profesores anuncian medidas

  Un profesor, durante una clasedavid aguero

En el punto contrario se encuentran los sindicatos madrileños ANPE y CSIF, que coinciden en su oposición a la medida. "No estamos de acuerdo por varios motivos, primero porque se ha hecho de espaldas al profesorado y a las organizaciones sindicales. No se ha negociado nada, no teníamos ninguna notificación", lamenta Esteban Serrano, secretario de organización de ANPE-Madrid, en conversación telefónica con El HuffPost.

"Va en contra del espíritu que se persigue aquí en Madrid, que es la libertad de los padres para poder elegir", apostilla. Desde su sindicato, abogan por que se permita a los centros públicos elegir libremente el tipo de jornada escolar “en base a criterios pedagógicos” y sin confundir “la jornada escolar con la asistencial”. 

Serrano también recuerda lo duros que ya eran los requisitos para que los centros pudieran cambiar a la jornada continua, puesto que hasta ahora se exigía que votaran dos tercios de los padres y que de ellos, dos tercios lo hicieran a favor: "Eso no se pide ni para investir al presidente nacional ni al autonómico, ni para aprobar ningún Real Decreto".

"Consideramos que esta medida no se ha hecho con unos criterios pedagógicos o educativos. Hay estudios tanto en un sentido como en otro, unos que valoran más la jornada continua y otros la partida. Sí que es verdad que nosotros, como docentes, apreciamos que las jornadas de tarde se les hacen muy pesadas a los alumnos, tienen más dificultades para mantener la atención y la concentración. Hay asignaturas que no se pueden dar después de comer", argumenta.

Sobre si se plantean emprender alguna acción, recuerda que "finalizamos el curso pasado con una serie de movilizaciones, entre ellas jornadas de huelga, porque estábamos solicitando la reducción del horario lectivo, la reducción de las ratios, un complemento de capitalidad... Ahora se suma esta medida, que se ha hecho de espaldas a todo el mundo. La próxima semana vamos a tener una reunión con las otras organizaciones sindicales para estudiar qué medidas llevar a cabo, no descartamos ninguna de las acciones", afirma.

Por su parte, CSIF-Madrid ha llegado a anunciar que “ejercerá una respuesta contundente y consensuada en el seno de la Mesa Sectorial a esta agresión sin precedentes”. En un comunicado, critica que el anuncio se ha realizado “sin propuesta inicial, sin evaluación previa, sin comunicación a la parte social" e incide en que también, “sin criterios pedagógicos que lo aconsejen, solo para mejorar la conciliación familiar”. “Es, sin duda, lo único que parece preocupar a nuestro Gobierno, que los alumnos permanezcan más tiempo en los centros, aunque no suponga ninguna mejora en su rendimiento académico”, agrega la organización sindical. Según CSIF, “la defensa de la libertad individual por parte del Gobierno de Ayuso, parece que termina donde empiezan los derechos de los funcionarios docentes y su contrastado éxito en las evaluaciones PISA”.