Descubren que las garrapatas 'vuelan' para llegar al ser humano
Un grupo de investigadores de la Universidad de Bristol ha hallado que se mueven por electricidad estática.
Hasta el momento, las evidencias científicas apuntaban a que las garrapatas solo podían pasar de un lado a otro a través de animales o plantas a las que se adhiriesen. Sin embargo, un nuevo hallazgo ha determinado que también pueden hacerlo a través de la electricidad estática.
Según esta investigación de un equipo de científicos de la Universidad de Bristol (Reino Unido) y publicada en la revista Current Biology, esta electricidad es en muchas ocasiones el doble que su energía y pueden ser el "primer ejemplo conocido de implicación de la electricidad estática en la adhesión de un animal a otro".
El investigador Sam England ha relatado en su cuenta de Twitter cómo las Ixodes Scapularis (garrapatas de los ciervos o garrapata de patas negras) se han acercado a pieles de conejo y otros materiales cargados estáticamente tras ser arrastradas por el aire, a través de entrehierros de varios milímetros o centímetros.
Tal y como cuenta el Servicio de Prevención y Medio Ambiente de la Universidad de Valencia en su web, la "electricidad estática no se crea, su aparición se debe a una distribución desigual y temporal de electrones. La carga electrostática no nace de la fricción de dos materiales, sino de la separación de dos superficies en contacto". "Al separar dos superficies anteriormente unidas, se provoca un desequilibrio en la distribución de cargas que origina un campo electrostático", detallan.
Las preocupaciones que surgen a raíz de estos hallazgos son las complicaciones que pueden producirse a raíz de las picaduras de garrapata, que al ser un parásito que se alimenta de un hospedador puede transmitir enfermedades infecciosas si está infectado. Posteriormente, transmite esta enfermedad al nuevo hospedador a través de una picadura.
Las enfermedades que pueden transmitir varían geográficamente. Según una información publicada por La Vanguardia, las especies de garrapatas más comunes en las zonas húmedas de España concuerdan también con las que lo son en la mayor parte de Europa. Son habituales las Ixodes ricinus y Dermacentor reticulatus, que suponen un peligro por la borreliosis de Lyme (Borrelia burgdorferi) además de la encefalitis vírica que pueden transmitir dichas especies.
En lo tocante a las zonas más secas de España, hay varias especies catalogadas como de interés sanitario: Hyalomma lusitanicum, Dermacentor marginatus y Rhipicephalus sanguineus (también en zonas de transición impera la Hyalomma marginatum). Son peligrosas por el ser humano porque pueden transmitir o mantener zoonosis como las fiebres Q (Coxiella burnetii), rickettsiosis (fiebre exantemática mediterránea), la hemorrágica de Crimea-Congo o la tularemia (Francisella tularensis).
En un primer momento, la picadura de una garrapata no tiene por qué suponer ningún riesgo, pero debe extraerse correctamente y se debe buscar atención médica para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuado.