Un soldado ucraniano es obligado a hacer un exorcismo
El piloto de drones Viktor Cherniiavskyi fue capturado y torturado por separatistas rusos cuando Rusia lanzó su invasión de Crimea en 2014.
Un soldado ucraniano ha declarado que fue torturado por separatistas rusos y obligado a someterse a un exorcismo, en parte debido a su fe cristiana evangélica. El piloto de drones Viktor Cherniiavskyi ha dicho que fue capellán de los cristianos evangélicos en el ejército ucraniano en 2014, cuando Rusia invadió la península de Crimea.
Mientras servía como voluntario en la ciudad de Lugansk, en el este de Ucrania, Cherniiavskyi fue capturado por fuerzas alineadas con Rusia. Durante sus 25 días de cautiverio, Cherniiavskyi ha afirmado que estuvo retenido en una celda del sótano de una prisión en Lugansk, donde lo golpearon con un bate de béisbol, le dispararon con pistolas en la cabeza y le dispararon repetidamente con una pistola eléctrica, según ha dicho al medio Business Insider.
Además, cuando sus captores se dieron cuenta de su fe evangélica, un sacerdote ortodoxo ruso de Moscú le realizó un exorcismo. "Cuando el sacerdote intentó expulsar demonios de mí, me dio dos razones: primero, por mis 'ojos morados'. En segundo lugar, porque soy cristiano evangélico. Cruzando las manos, me empujó a besar el crucifijo", ha asegurado el soldado ucraniano al mismo medio.
Cherniiavskyi ha señalado que el Kremlin tenía un odio particular hacia los protestantes y los cristianos evangélicos y que Moscú veía a cualquiera afiliado a iglesias estadounidenses como "agentes extranjeros". Mientras, algunos miembros de la derecha cristiana estadounidense han mostrado, irónicamente, su apoyo a Rusia, ya que ven al país del presidente ruso, Vladimir Putin, como un aliado en una guerra cultural global.
Algunos conservadores cristianos comparten los puntos de vista tradicionalistas de Rusia sobre la familia, la sexualidad y el género. De hecho, cuando Rusia lanzó su invasión de Crimea en 2014, el exasesor presidencial y paleoconservador Pat Buchanan hizo la siguiente pregunta: "¿De qué lado está dios ahora?".
Buchanan destacó entonces su admiración por la forma en que Putin aparentemente defiende los valores cristianos. "En la guerra cultural por el futuro de la humanidad, Putin está plantando firmemente la bandera de Rusia del lado del cristianismo tradicional", escribió.
Los evangélicos conservadores estadounidenses han forjado vínculos simbólicos con la Iglesia Ortodoxa Rusa, atraídos por el tradicionalismo religioso y el nacionalismo blanco de Rusia, informó el Boston Review. A pesar de esos vínculos, el Kremlin no ha correspondido a este acercamiento.