Ucrania intenta romper la guerra desde las dunas
En el frente oriental los esfuerzos de las tropas rusas chocan con la enconada resistencia de las fuerzas de Kiev, en el sur de la región de Jersón, en la margen izquierda de río Dniéper, las tropas ucranianas marcan cada vez más presencia.
Ucrania afronta su segunda campaña de guerra invernal con las primeras nieves mientras la tropas rusas y ucranianas intercambian ataques en los frentes este y sur, donde los segundos avanzan, sin que ningún bando logre consolidar sus avances.
Avdivka, una pequeña ciudad el noreste de Donetsk, la capital de la región oriental homónima, se ha convertido en el objetivo inmediato de las tropas rusas, que intentan cercarla desde comienzos de octubre pasado, pero hasta ahora sin éxito. Mientras, en el frente oriental los esfuerzos de las tropas rusas chocan con la enconada resistencia de las fuerzas de Kiev, en el sur de la región de Jersón, en la margen izquierda de río Dniéper, las tropas ucranianas marcan cada vez más presencia.
El Instituto de Estudios de la Guerra asegura que los ucranianos han consolidado varias posiciones en la orilla izquierda del río Dnipro, que han liberado las islas situadas en pleno cauce y que son capaces de lanzar ataques desde esos puntos, según información de El Mundo.
Las fuerzas especiales de Kiev ya habían desembarcado varias veces al otro lado del río, pero hasta ahora no habían conseguido ampliar el perímetro de su reconquista, según el mismo medio. Este resalta, además, que los últimos vídeos filtrados desde el lado ruso revelan que la cabeza de puente es más grande de lo que parecía hace una semana.
Las dos cabezas de puente, además, se sitúan a norte y sur de un parque natural lleno de dunas en las que ningún vehículo blindado o cañón de artillería podría situarse sin hundirse, en Krinky y la zona del destruido puente ferroviario. Ahora Ucrania, según el mismo medio, busca alcanzar el extremo del parque para poder alejar lo suficiente a los rusos para poder montar pontones sobre el río Dnipro o, como poco, poder mover vehículos sobre barcos más grandes para mantener una logística que permita un gran desembarco.