Sudáfrica acusa a Israel de incorporar "intención genocida" en Gaza a su política estatal
Se han enumerado declaraciones hechas por representantes israelíes en un "lenguaje de deshumanización sistemática", en las que se ha calificado a los palestinos como "animales humanos" y donde "Hamas y los civiles son condenados por igual".
Sudáfrica aseguró hoy que los "actos genocidas" de los que acusa a Israel "no son marginales, y están incorporados en la política estatal" de Tel Aviv, y señaló como prueba el "lenguaje de deshumanización sistemática" usado por altos cargos israelíes para calificar a los palestinos de Gaza de "animales humanos".
"La intención genocida de Israel tiene sus raíces en la creencia de que el enemigo no es sólo el ala militar de Hamás, o incluso Hamás en general, sino que está incrustado en el tejido de la vida palestina en Gaza. Israel es la potencia ocupante que controla Gaza. Controla la entrada, la salida y el movimiento interno dentro de Gaza", aseguró el abogado sudafricano Tembeka Ngcukaitobi, durante una audiencia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
El abogado enumeró declaraciones hechas por representantes israelíes en un "lenguaje de deshumanización sistemática", en las que se ha calificado a los palestinos como "animales humanos" y donde "Hamas y los civiles son condenados por igual" y se considera que en la Franja "no hay civiles inocentes".
"Los actos genocidas no son marginales, sino que están incorporados en la política estatal. Los soldados en el terreno entienden claramente la intención de destruir. Algunos miembros de la sociedad israelí también lo entienden plenamente, ya que el gobierno enfrenta críticas cuando permite ayuda en Gaza, pues lo acusan de retractarse de su promesa de matar de hambre a los palestinos", explicó el letrado.
La clave del caso: posible violación de la Convención sobre el delito de genocidio
El caso que escucha este jueves y viernes la CIJ se centra en la presunta violación por parte de Israel de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, aprobada en 1948 y en vigor en 152 países.
Pero estas audiencias no entrarán aún en el fondo del caso, y solo se centrarán en la necesidad de medidas cautelares solicitadas por Sudáfrica contra Israel para proteger a los palestinos.
Ngcukaitobi advirtió de que la falta de condena de este discurso "ha servido para normalizar la retórica genocida en extremo peligro para los palestinos dentro de la sociedad israelí" y promueve la retórica de que "los palestinos en Gaza deben ser destruidos", lamentó.
"Periodistas y comentaristas han anunciado que la mujer es un enemigo, el bebé es un enemigo, la mujer embarazada es un enemigo. Que es necesario convertir la Franja en un matadero, demoler cada casa que nuestros soldados se encuentren. Exterminar a todos. El fracaso intencionado del gobierno de Israel de condenar, prevenir y castigar estas incitaciones al genocidio supone en sí mismo una gran violación de la Convención contra el Genocidio", agregó.
Sudáfrica acusa a "líderes políticos y comandantes" de declarar su "intención genocida"
Sudáfrica acusó a "lideres políticos israelíes, comandantes militares, y personas que tienen cargos oficiales" de declarar públicamente su "intención genocida de forma sistemática y explícita".
Aseguró también que "los soldados en el terreno entienden claramente la intención de destruir" la Franja como objetivo de la ofensiva militar, que comenzó después del ataque del grupo islamista Hamas a Israel el 7 de octubre, que dejó más de 1.200 muertos.
"Cualquier sugerencia de que los funcionarios israelíes no quisieron decir lo que dijeron o que tanto los soldados como los civiles no entendieron bien lo que dijeron, debería ser rechazada por este tribunal. Las pruebas de la intención genocida no sólo son escalofriantes, sino también abrumadoras e incontrovertibles", aseguró.
La ofensiva sobre Gaza ha dejado devastado el enclave, con más de 23.300 palestinos muertos, más de 60.000 heridos y 1,9 millones de desplazados en un territorio habitado por 2,3 millones de personas.