Rusia muta el temido Kalashnikov en un arma más mortífera

Rusia muta el temido Kalashnikov en un arma más mortífera

Será de menor peso, tamaño y protegerá de mejor forma la mano del tirador de las altas temperaturas durante el disparo, según defiende su fabricante. 

KalashnikovGetty Images

El fabricante de armas 'Kalashnikov', el mayor de Rusia en este sector, comenzará la producción en masa de un nuevo fusil de asalto AM-17 de menor tamaño para 2025, han informado a través de su página oficial en Telegram. El objetivo es que sustituya a los fusiles de asalto AKS-74U que utilizan actualmente las tropas rusas. 

Desde el consorcio advierten que el estándar continuará siendo el mismo, aunque su modelo de producción mejorará respecto a los modelos de prueba. Sin embargo, habrá que esperar para comprobar si esta nueva apuesta no enfrentará problemas similares a los de su predecesor, como la corrosión de los elementos metálicos, como el canal del cañón o el pistón de gas. 

Características técnicas del AM-17

Con un calibre de 5,45 mm y una capacidad de 30 cartuchos, es capaz de realizar 850 disparos por minuto. Su longitud varía según su posición, en transporte ocupa 490 mm, mientras que en combate 750. 

Fue diseñado para sustituir al AKS-74U, el cual lleva operativo desde 1979. Entre algunas de sus innovaciones se destaca su diseño, realizado de materiales poliméricos de alta resistencia, lo que le permite cumplir con los estándares de peso actuales. También cuenta con una culata telescópica plegable y un interruptor bidireccional para los distintos modos de disparo. 

Drones de reconocimiento Legioner

Por otra parte, el grupo fabricante ha anunciado este miércoles la producción en serie de drones de reconocimiento Legioner. La oficina de prensa de 'Alas Silenciosas' , perteneciente a Kalashnikov, anunció que producirá 100 drones en 2024, 250 en 2025 y más de mil en 2026. También se inaugurarán 48 centros de diseños y de producción de drones en varias partes del país. 

Según informa el comunicado, despegan y aterrizan de forma vertical y pueden funcionar con un motor eléctrico o de combustible. Se emplean para misiones de reconocimiento y para detectar infracciones en zonas sensibles y protegidas.