Putin recibe a los ocho presos liberados en el canje con Occidente, incluido el periodista español Pablo González

Putin recibe a los ocho presos liberados en el canje con Occidente, incluido el periodista español Pablo González

"Quiero darles las gracias por su lealtad al juramento, su deber con la patria que ni un minuto se olvidó de ustedes".

Vladimir Putin, esta madrugada, recibiendo a los presos, entre ellos, Pablo González.MIKHAIL VOSKRESENSKIY / SPUTNIK / KREMLIN / EPA / EFE

El presidente ruso, Vladímir Putin, recibió hoy personalmente en el aeropuerto moscovita de Vnúkovo-2 a los ocho presos liberados en el mayor canje con Occidente desde 1985, incluido el periodista español Pablo González. En las imágenes ofrecidas en directo por la televisión rusa se pudo ver cómo Putin abrazó en primer lugar al pie de la escalerilla del avión a Vadim Krásikov, el agente del Servicio Federal de Seguridad (FSB) condenado a cadena perpetua en Alemania por asesinar en 2019 a un ciudadano georgiano.

Seguidamente, saludó uno por uno a los presos liberados, con los que después se reunió en un acto privado en el edificio del aeropuerto, adonde llegaron procedentes de Ankara, donde tuvo lugar el canje.

"Primero de todo quiero felicitar a todos por su regreso a la patria. Ahora quiero dirigirme a los que tienen relación con el servicio militar. Quiero darles las gracias por su lealtad al juramento, su deber con la patria que ni un minuto se olvidó de ustedes", dijo Putin.

Además, prometió que todos recibirán medallas estatales y que próximamente hablarán sobre su futuro.

Se mostró especialmente emocionada Anna Valereva Dulceva, quien se fundió llorando en un abrazo con el jefe del Kremlin, que le regaló un ramo de flores en presencia de sus dos hijos.

Le acompañaba su marido, Artem Viktorovic Dulcev, quien junto a su esposa se declaró culpable de los cargos de espionaje y falsificación de documentos ante la Justicia de Eslovenia.

González, español de origen ruso que descendió por la escalerilla con una mochila a la espalda, también dio la mano al presidente ruso.

Los presos fueron recibidos con honores de Estado, ya que a la salida del avión les esperaba la guardia de honor y una alfombra roja en su camino al edificio del aeropuerto.

Al acto también asistió Serguéi Narishkin, el jefe del Servicio de Espionaje Exterior, y Andréi Beloúsov, ministro de Defensa ruso.

El FSB confirmó la liberación de los ocho rusos encarcelados en países de la OTAN, a cambio de 15 rusos y extranjeros que cumplían penas en prisiones de este país, y un ciudadano alemán condenado a muerte en Bielorrusia.

Los otros cuatro rusos liberados fueron Mijaíl Mikushin, condenado por espionaje en Noruega; el jáquer Román Selezniov, que cumplía 27 años de prisión en EEUU; Vladislav Kliushin, sentenciado en ese país a nueve años por delitos informáticos; y Vadim Konoschenok, detenido en Estonia y extraditado a EEUU por comprar equipamiento electrónico para la industria militar rusa.

Seguidamente, Putin indultó a 13 de los dieciséis presos entregados por Rusia y Bielorrusia a los países occidentales, entre los que figuraban tres estadounidenses -entre ellos el periodista de The Wall Street Journal, Evan Gershkovich-, cinco alemanes y ocho rusos, en su mayoría activistas y opositores.

La lista de indultados no incluyó a tres ciudadanos alemanes que sí fueron liberados: Rico Krieger, que fue indultado esta semana por el presidente bielorruso Alexandr Lukashenko tras ser condenado a muerte por terrorismo; y German Moyzhes y Patrick Schoebel, a los que la Justicia rusa nunca llegó a condenar formalmente por alta traición y narcotráfico, respectivamente.

El Kremlin expresó su agradecimiento a los dirigentes de todos aquellos países que participaron en el intercambio de presos.

Emoción en EEUU y Alemania

Poco antes, el canciller alemán, Olaf Scholz, recibía también en el aeropuerto de Colonia/Boon a los alemanes liberados en el marco del acuerdo. Scholz ha indicado que se trata de "un momento especial" y que "todos llegaron sanos y salvos". "Muchos me han dicho que no esperaban ser liberados. Se sienten abrumados por ser libres de repente", ha asegurado. "Estoy convencido de que esta ha sido la decisión correcta. Somos una sociedad caracterizada por el humanismo. Estos 16 defendieron la democracia y la libertad; pueden contar con nosotros para protegerlos", ha indicado a través de su perfil en la red social X.

Un total de cinco alemanes han sido liberados Kevin Lik, Demuri Voronin, el abogado Herman Moyzhes y Patrick Schoebel. La mayoría de ellos acusados de traición. Bielorrusia ha entregado a Rico Krieger, acusado de terrorismo. Por su parte, Berlín ha entregado a liberado a Vadim Krasikov, condenado a cadena perpetua por matar a un ciudadano georgiano de origen checheno en 2019.

Y la misma escena se repetía, al fin, en EEUU. El presidente, Joe Biden, y la vicepresidenta, Kamala Harris, han recibido en Maryland a los tres estadounidenses liberados: el exmarine Paul Whelan, el periodista del diario Evan Gershkovich, y la periodista ruso-estadounidense Alsu Kurmasheva.

Biden y Harris se han trasladado a la Base de la Fuerza Aérea Andrews, ubicada en el estado de Maryland, donde han recibido pocos minutos antes de la medianoche en la pista a los presos liberados durante la jornada. Tras ello, Whelan, Gershkovich y Kurmasheva se han reunido con sus seres queridos. Poco después del recibimiento, Biden se ha acercado a los medios de comunicación presentes en el lugar y ha aseverado que su gabinete tiene "más trabajo que hacer", mientras que ha alabado a la ayuda de los países aliados por haber conseguido impulsar el acuerdo. "Mi trabajo es asegurarme, en primer lugar, de que no los encarcelen. Y si lo hacen, los recuperamos", ha concluido.

"Es una sensación maravillosa. Ha tardado mucho en llegar. Estaba absolutamente convencido de que podíamos lograrlo. Lo decía en serio cuando dije que las alianzas marcan la diferencia. Ellos dieron un paso adelante y se arriesgaron por nosotros y eso fue muy importante", ha declarado, reconociendo que "la decisión más difícil" no ha sido de Washington, sino de otros de los países: "Les pedí que hicieran algunas cosas que iban en contra de sus intereses inmediatos, como Alemania y Eslovenia".

La vicepresidenta ha dicho que "es un día increíble": "Puedes verlo en las familias, en sus ojos y gritos", ha dicho. "Estoy muy agradecido a nuestro presidente y lo que ha hecho aquí", ha expresado antes de subrayar que "se trata de un extraordinario testimonio de la importancia de contar con un presidente que comprende el poder de la diplomacia" y "el fortalecimiento de las alianzas".