Marruecos paga una millonada para arrebatar Ceuta a España
La estrategia del país alauí busca acabar fomentar mensajes desestabilizadores en la ciudad autónoma española.
Marruecos ha puesto sobre la mesa una oferta al gobierno español con la que espera conseguir aumentar su influencia en Ceuta. Para ello, el país alauí prepara 50 millones de euros con los que supuestamente financiar organizaciones civiles para que reclamen un referéndum de autodeterminación de la ciudad autónoma española.
De acuerdo con lo comunicado por el CNI, la estrategia marroquí sería la de crear todo tipo de organizaciones y asociaciones, además de impulsar campañas a través de redes sociales y programas educativos con el objetivo de crear una conciencia y así acercarse al objetivo que Marruecos persigue desde hace décadas e incluir Ceuta en su territorio.
Además, esta campaña no supondría un esfuerzo especialmente grande por parte del gobierno marroquí, ya que no requiere de una invasión terrestre o aérea con tanques, soldados o similares, sino simplemente iniciar una especie de guerra cultural y conseguir que su narrativa se imponga en Ceuta.
De acuerdo con los informes publicados por Marruecos, el dinero que se destinará a esta operación procederá especialmente de ONGs y asociaciones religiosas, que fomenten la "reunificación" de Marruecos y la ciudad ceutí.
Entre todas las prácticas, hay algunas que preocupan especialmente a la inteligencia española como es la creación de programas educativos que inculquen a los más pequeños la noción de que Ceuta fue un territorio histórico marroquí y que les fue "arrebatada" por España. Todo ello fomentado por los líderes religiosos desde Rabat.
Otra de las que más peligro advierten desde España la constituyen las campañas en redes sociales, con la presencia de bots y perfiles falsos que difundan todo tipo de mensajes favorables a la corriente marroquí y a sus aspiraciones territoriales. Muchas de estas cuentas han sido detectadas por los expertos en ciberseguridad españoles, que han podido comprobar qué tipo de mensajes se difunden, principalmente por parte de la comunidad musulmana de Ceuta y también por destinado al electorado español en la Psnínsula.
“Esto no es un ataque improvisado; es una operación meticulosamente planeada, con un alcance que va mucho más allá de Ceuta”, asegura uno de los analista en ciberseguridad, que además encuentran paralelismos con lo ocurrido en Rusia y su campaña en Ucrania y los países bálticos, donde el principal objetivo fue el de desestabilizar a la población local en zonas clave con todo tipo de campañas de desinformación así como un gran apoyo financiero.