Los tanques tortuga de Rusia se quedan ciegos
Las minas y los drones ucranianos hacen daño incluso a los vehículos con blindaje reforzado de su invasor.
Rusia tiene las riendas de esta etapa de la guerra en Ucrania, pero eso no quiere decir que no sufra daños y contratiempos. Uno de ellos tiene que ver con sus potentes tanques: los ha blindado, los ha reforzado, los ha mejorado y, aún así, los drones y las minas ucranianas les están haciendo un importante roto.
Según publica el medio especializado Zona Militar, "tanques y vehículos de combate continúan recibiendo blindajes improvisados y contramedidas electrónicas, soluciones que de momento se han mostrado insuficientes para hacer frente a los enjambres de drones ucranianos", esos UAV fabricados en casa y que están siendo uno de los mayores logros de su industria de guerra en los últimos tiempos. .
El citado medio destaca que desde hace ya semanas las tropas rusas han apostado por "diversas soluciones de blindaje improvisado para sus blindados", una medida de seguridad que "limita considerablemente" sus capacidades, pero les da seguridad. Pese a ello, en canales especializados se están publicando fotos y vídeos que evidencian que incluso convertidos en "verdaderas tortugas de acero", los blindados acaban siendo atacados y afectados. "Las configuraciones adoptadas niegan considerablemente el movimiento de la torre y la visión exterior, reduciendo casi a cero la conciencia situacional de la tripulación", destaca.
Los de Vladimir Putin, que tienen su industria doméstica de defensa trabajando a pleno rendimiento y salvando, por ahora, la economía patria, estudian distintas formas de protección para sus tanques. "Están en proceso de incorporar numerosas soluciones pasivas para minimizar la efectividad de los drones FPV ucranianos", constata Zona Militar. Esto ha cuajado en distintos modelos de "inhibidores y contramedidas electrónicas", que por ahora no acaban de ser efectivos.
Los ágiles drones FPV no son sólo patrimonio de Ucrania. Rusia los emplea con profusión, en muchos casos con material llegado de Irán. Por eso, también sufren lo suyo en el otro bando y también está tratando de blindarse más y no tener desgaste. "El Ejército Ucraniano incluso debió adoptar medidas drásticas, ya que se vio obligado a retirar a sus tanques M1A1 Abrams (norteamericanos) del frente. Esta decisión fue por la vulnerabilidad de los tanques ante el ataque de drones, sumado a la compleja situación que están enfrentando las fuerzas defensoras debido a la falta de munición, personal y suficientes medios de apoyo", sostiene el citado digital.
Eso afecta a su pretendida contraofensiva, que iba a lanzar el año pasado, pero que es inviable en estos momentos por la presión rusa y la falta de material de los aliados occidentales. "Las fuerzas terrestres ucranianas han sufrido una considerable degradación en sus capacidades para operar como un elemento homogéneo de armas combinadas, limitándose a ofrecer una resistencia estática a medida que van cediendo las diversas líneas de defensa", se añade.
En el caso de las fuerzas invasoras rusas, "sostienen sus avances pese a las cuantiosas pérdidas de material". Hay conquistas, sí, pero con un precio alto que pagar. "Sin embargo, la constante adopción de contramedidas refleja la necesidad de brindar una mejor protección al personal y los medios blindados con el objetivo de reducir pérdidas", expone.
"Pese a que el complejo industrial ruso se ha adaptado a los ritmos de un conflicto en curso, y a la sensación de que las fuerzas rusas pueden absorber las mencionadas bajas, los stocks de vehículos de combate no son ilimitados, mientras que la reposición de las pérdidas cada vez tiene un costo más elevado", ahonda.
"La siempre presente amenaza de los drones de ataque continúa siendo un aspecto sin solución, situación que es tenida en cuenta por todos los actores que siguen de cerca el desarrollo del conflicto ucraniano", concluye.
