Los cazas rusos van a la huelga
"Estas interrupciones no han sido inusuales".
La Inteligencia británica ha detectado lo que asemeja un nuevo parón en la actividad de un activo militar clave de Rusia para la invasión de Ucrania. "Los aviones de Aviación de Largo Alcance (LRA) de la Fuerza Aérea Rusa no han realizado ningún ataque contra Ucrania desde el 21 de septiembre de 2023", han comunicado en su informe diario, lo que constituye un período de 21 días de inactividad.
Desde la Inteligencia de Reino Unido también apunta que no se trata de parones "inusuales", puesto que "la última interrupción similar en las huelgas ocurrió entre el 9 de marzo y el 28 de abril de 2023, un período de 51 días".
Dos motivos distintos
No obstante, señalan que podrían existir dos motivaciones distintas. En el primero de los casos, "era probable que el LRA casi hubiera agotado sus reservas de municiones para misiles AS-23 tras su campaña invernal contra la infraestructura nacional crítica de Ucrania", mientras que en este último parón la razón sería otra.
"Es probable que el LRA ruso esté preservando las existencias existentes de misiles AS-23 y aproveche esta pausa para aumentar las existencias utilizables en previsión de nuevos ataques fuertes contra Ucrania durante el invierno", se recoge en el reporte diario, en el que también se recuerda otra clave de la actual hoja de ruta rusa en el país invadido.
"Rusia ha centrado sus ataques aéreos contra instalaciones relacionadas con cereales en todo el sur de Ucrania, utilizando vehículos aéreos no tripulados de ataque unidireccional SHAHED (OWA UAV)", señalando que así se efectuaron ataques "contra puertos ucranianos del río Danubio, que probablemente requirieron un alto nivel de precisión debido a la proximidad del objetivo a la frontera rumana".
Así, la Inteligencia británica resuelve que "es probable que Rusia haya utilizado vehículos aéreos no tripulados SHAHED OWA en estos objetivos debido a su mayor precisión que otros tipos de misiles lanzados desde el aire".