El gasto secreto quema el presupuesto de Rusia
El gobierno de Moscú oculta 'el gasto secreto' que se encuentra detrás del enorme déficit ruso.
Que la guerra iba a traer consecuencias para las finanzas rusas era algo con lo que todo el mundo contaba, pero que este 2023 iba a ser tan duro -o al menos eso indican los datos económico del Kremlin- quizá no tanto.
Las sanciones occidentales -corte de suministro de petróleo y gas en 2022- parece que, poco a poco, están haciendo mella en la economía rusa, hasta el punto de que el gobierno de Moscú ya ha gastado todo lo que tenía presupuestado para 2023, y tan solo estamos en mayo.
Los datos son claros: Rusia ya ha superado el déficit presupuestario que tenía calculado para todo el año. En cifras, esto se traduce en que, en tan solo cuatro meses, ya suma 40.979 millones de euros en pérdidas, algo marcado y acentuado por la reducción en los ingresos del petróleo y el gas por parte de Occidente, algo que implica una caída de un 52%, según informa el Ministerio de Finanzas.
El gasto secreto ruso
Aunque la imagen que Rusia quiere trasladar al exterior es la de una economía fuerte y que no está notando las consecuencias del impacto de las medidas en su contra, algo para lo que está abriéndose a otros mercados y afianzando relaciones internacionales con países africanos, asiáticos y sudamericanos, la realidad es muy distinta.
Esto se debe a muchos factores, pero principalmente a dos: el petróleo y el gasto 'secreto', que cada vez aumenta más. Esto se refiere a que Rusia, en estos momentos, está ocultando hasta un tercio del gasto presupuestario, una cifra sin precedentes según recoge Bloomberg.
Este gasto se encuentra fuera de la vista pública y, aunque es secreto y se desconoce a dónde va, sí se sabe a cuanto asciende. Se trata de una muestra más de la reestructuración financiera que Rusia se ha visto obligada a realizar debido a la campaña militar en Ucrania.
El Ministerio de Finanzas, a fecha de 24 de marzo, establecía este gastos en 2,4 billones de rublos (31.000 millones de euros), lo que supone más del doble que el mismo período de hace un año, según recoge Bloomberg Economics.
Billones de déficit
Estos datos chocan frontalmente con las previsiones de Moscú, que estableció para este año un déficit máximo de 2,9 billones (35.000 millones de euros), o lo que es lo mismo, un 2% del PIB.
Este desajuste en la cuentas también obedece a la reducción de ingresos entre enero y abril, que llegaron a los 7,8 billones de rublos (93.100 millones de euros), lo que supone un 22,4% menos que en el mismo período del pasado año.
Por su parte, el Ministerio de Finanzas intenta tranquilizar a la población, asegurando que "la dinámica mensual de los ingresos del petróleo y el gas está entrando gradualmente en una trayectoria estable", aunque sin duda, el tope al precio del petróleo ruso y sus derivados, ha supuesto un golpe durísimo para una economía rusa que no parece que pueda contener la situación por mucho más tiempo.