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Europa da otro paso en su desconexión rusa: un nuevo país cambia la red eléctrica por generadores domésticos

Europa da otro paso en su desconexión rusa: un nuevo país cambia la red eléctrica por generadores domésticos

La inminente disociación de la red eléctrica de Estonia y su sincronización con la red europea continental está provocando un aumento en las compras de aparatos para casa, muchos de ellos con un coste de cientos, o incluso miles, de euros.

Un ingeniero revisa unas torres de electricidad, en una imagen de archivo. YorVen via Getty Images

La inminente disociación de la red eléctrica de Estonia y su sincronización con la red europea continental está provocando un aumento en las compras de generadores domésticos, muchos de ellos con un coste de cientos, o incluso miles, de euros. Hay miedo al frío a las puertas de febrero. 

A finales de la próxima semana, el viernes 8 de febrero, el país se desconectará de la red eléctrica rusa y bielorrusa BRELL y se conectará casi simultáneamente al sistema europeo continental. Un paso que se da en línea con una estrategia general de separación de los intereses rusos y de mayor autonomía, como respuesta a la invasión de Ucrania, en febrero de 2022. 

El medio estonio ERR ha estado en las calles, con los ciudadanos, para constatar la nueva tendencia. Por ejemplo, en enero, la fábrica de artículos para el hogar Bauhof vendió docenas de generadores más que durante el mismo mes del año pasado. No se quedará sin existencias, avisa, pero uno de sus competidores, Ehituse ABC, ya ha tenido que restringir su selección de generadores, debido al aumento de las ventas.

Priit Vao, director de ventas comerciales y comercio electrónico de Bauhof, dijo a ERR: "Estamos viendo un fuerte aumento en las ventas de generadores hoy, tanto en tiendas minoristas como en canales B2B y en línea". "El mayor crecimiento de ventas proviene de la tienda en línea, donde hay una gama más amplia de productos disponibles", añade.

Según el sitio web de Bauhof, los precios de los generadores comienzan en 351 euros, mientras que el generador diésel más caro disponible cuesta hasta 3.532.

Según Vao, todavía hay generadores disponibles en cantidades suficientes y no hay motivos para el pánico.

Los modelos más populares son aquellos con un precio de alrededor de 500 euros o menos, pero en términos de potencia, los generadores más buscados oscilan entre 2.000 y 2.600 vatios, lo que los hace adecuados para uso doméstico.

También está disponible una gran selección de diferentes generadores a través del sitio web de K-Rauta, otra gran cadena de mejoras para el hogar. El modelo más barato cuesta 235 euros, sólo para clientes titulares de la tarjeta de fidelización, mientras que el más caro cuesta 2.459 euros.

En Ehituse ABC, el generador más barato cuesta 319 euros, mientras que el modelo más caro está actualmente a la venta por 1.769 euros.

La directora de ventas y marketing de Ehituse ABC, Margo Pruunlep, dijo que la tienda en línea de la compañía ofrece un total de ocho generadores diferentes. "Las cifras de ventas de enero indican claramente un mayor interés por los generadores, especialmente en el rango de precio de 500 euros", afirmó Pruunlep. Si bien los generadores todavía están disponibles en sus tiendas, Pruunlep agregó que el stock es limitado.

No es la primera vez en los últimos años que se produce una avalancha de generadores domésticos. Durante la pandemia, las ventas se dispararon, aunque lo más notable fue que en septiembre de 2022, a raíz de la invasión rusa de Ucrania y más de un año después de que los precios de la energía comenzaran a dispararse, la entonces primera ministra Kaja Kallas (hoy jefa de la diplomacia comunitaria) pronunció un discurso público instando al público a prepararse para posibles cortes de energía. Esto, a su vez, desató un frenesí de compra de generadores y algunas tiendas agotaron todos sus productos.

El contexto

El 8 de febrero, Letonia y Lituania se unirán a Estonia para desconectarse de los cables eléctricos conectados a Rusia, de sur a norte, empezando por Lituania y terminando en Estonia. Está previsto que durante la tarde del segundo día, es decir, el 9 de febrero, los cables de Lituania estén conectados a la red eléctrica de Polonia.

Mientras tanto, Estonia podrá recibir energía de Finlandia a través de un cable submarino si es necesario; Lituania tiene una conexión similar con Suecia.

En cualquier caso, durante el periodo de transición, los tres Estados bálticos tendrán que arreglárselas por sí solos, compartiendo entre ellos la generación y el consumo de electricidad.

El distribuidor de red eléctrica de Estonia, Elering, ha asegurado que la capacidad energética local de la región del Báltico será suficiente para mantener la frecuencia de la red incluso si fallaran ambas conexiones entre Estonia y Finlandia.

A pesar del bajo riesgo estimado de cortes de energía, la preparación para ellos se ha convertido una vez más en un problema urgente.

La mayoría de los generadores de electricidad domésticos funcionan con gasolina, diésel, propano o gas natural, por lo que también es necesaria la compra y el almacenamiento seguro o el suministro de estos combustibles; también se fabrican generadores que funcionan con energía solar.