El túnel más largo del mundo ultima su reconstrucción: transportará casi 5.000 millones de litros de agua al día
Las obras de reparación que implican al acueducto de Delaware, en Nueva York, durarán en torno a seis meses.
En pocas semanas dará comienzo la 'megareconstrucción' en uno de los lugares claves de la ciudad que nunca duerme, Nueva York. El proyecto, que lleva en marcha desde hace más de un año y medio, se prevé que dé el último paso en poco tiempo, y estiman que en un plazo de cinco o seis meses esté completamente terminado.
Hablamos del túnel más largo del mundo, con una extensión de unos 136 km y que transportará en torno a 5.000 millones de litros de agua diarios para abastecer la demanda acuífera en la ciudad neoyorquina y ciudades colindantes.
Técnicamente, se trata de una reparación, aunque las dimensiones de las obras son de tal calado que bien podría considerarse como una construcción faraónica. El motivo de estas nuevas modificaciones tiene su origen en las grandes fugas con las que cuenta el túnel desde hace una década y que ya se han vuelto insostenibles, debido a la inmensa cantidad de agua que se pierde de forma diaria. Se estima que se desperdician unos 132.500.000 litros al día.
Para poner en contexto, hay que destacar que Nueva York depende en gran medida de los embalses del norte del estado para poder abastecerse. Pero hay que remontarse más atrás para comprender que su origen, ya que este tuvo lugar cuando se inundaron decenas de pueblos y aldeas al norte del estado, que provocaron una emigración masiva de miles de personas, además de la muerte de otros miles.
Según informan, el centro del sistema se encuentra en el acueducto de Delaware, y las reformas se han convertido en los últimos años en una prioridad, ya que, además de desperdiciarse una ingente cantidad de agua, este problema trae consigo otros, como son los desbordamientos o las inundaciones en sótanos de infinidad de casas que se ubican a cientos de pies por encima del acueducto.
Por todo esto, el Departamento de Protección Ambiental de Nueva York comprobó y supervisó el sistema y optó por ordenar la construcción de un túnel derivado en el que el acueducto quedará bajo el río Hudson.
Así, se estima que durante los próximos seis meses, el acueducto se cerrará para completar las obras y habilitar un nuevo desvío, que supondrá numerosas reparaciones y obras de mantenimiento. Por último y para asegurar el abastecimiento de toda la población, las autoridades llenarán previamente los embalses de otros acueductos.
