Un buzo se sumerge en el barco hundido Sea Story y encuentra a su sobrino vivo atrapado en la cabina
Una pequeña historia con final feliz dentro de la tragedia.
El yate turístico Sea Story se hundió este lunes a la altura de Marsa Alam (Egipto) dejando al menos cuatro muertos. Las autoridades egipcias han explicado que, según los supervivientes, el accidente fue provocado “por una gran ola del mar que golpeó el barco y lo volcó de forma repentina y rápida, en unos 5 o 7 minutos”.
Sin embargo, las tragedias a veces también dejan alguna historia con final feliz. Y eso es lo que ha ocurrido en este naufragio en el mar Rojo. Los supervivientes precisaron que el suceso tuvo lugar cuando “algunos de los pasajeros estaban dentro de los camarotes, por eso no lograron salir del barco”.
Y ello ha podido ser comprobado de manera directa por un submarinista que ha participado en las labores de rescate del Sea Story. Efectivamente, un grupo de personas que han podido ser rescatadas habían quedado encerradas en los camarotes.
No obstante, lo que no esperaba ese submarinista, llamado Khattab al-Faramawy, era que entre los individuos atrapados estuviera su sobrino Youssef, de 23 años, también buzo que trabajaba a bordo del yate como instructor de buceo para turistas.
De hecho, el joven estaba intentando rescatar a las personas que quedaban en el camarote cuando quedó atrapado en el barco, el cual estaba sumergido en su mayor parte salvo medio metro que sobresalía del mar. Los supervivientes pudieron beneficiarse de una burbuja de aire que les permitió sobrevivir durante 24 horas.
“Buceamos hasta una profundidad de 12 metros y encontramos a los supervivientes que habían quedado atrapados en los camarotes del barco”, ha señalado Khattab al-Faramawy en declaraciones a la BBC.
El submarinista, además, ha destacado que el rescate fue una “misión complicada” debido a la oscuridad bajo el agua. “Usamos linternas para intentar orientarnos en la oscuridad”, ha detallado.
