Bielorrusia confirma la llegada de los temidos misiles rusos: "Ni siquiera se han dado cuenta"
Lukashenko ya busca localización en 30 sitios para ubicar los sistemas de misiles Oreshnik, con la luz verde de Putin.
El dictador de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha informado de que "varias docenas" de ojivas nucleares rusas están ahora desplegadas en su país y que alrededor de 30 sitios están siendo considerados como ubicaciones potenciales para los sistemas de misiles Oreshnik, que recientemente han sido probados en combate en un ataque masivo contra Ucrania.
Lukashenko hizo estas declaraciones durante su visita a la ciudad bielorrusa de Barysau, cuatro días después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, anunciara que los sistemas de misiles Oreshnik se desplegarían en Bielorrusia en paralelo a su incorporación a las Fuerzas de Misiles Estratégicos de Rusia. Putin aseguró que el despliegue de Oreshniks en Bielorrusia podría ocurrir tan pronto como en la segunda mitad de 2025.
"Muchos han dicho: 'Es una broma, nadie ha desplegado nada'. Sin embargo, lo hemos hecho. Decir que es una broma significa que no se han dado cuenta. Ni siquiera se han dado cuenta de cómo los trajimos aquí", dijo Lukashenko en referencia a las ojivas nucleares tácticas rusas en Bielorrusia, según la agencia de noticias estatal BelTA.
Estos acontecimientos abren una nueva etapa en la estrategia militar y el desarrollo de las relaciones entre Rusia y Bielorrusia. También ponen de relieve la profundización de la integración militar entre los dos países y la creciente presencia militar de Rusia en Europa del Este.
El misil Oreshnik fue lanzado por primera vez por Rusia el mes pasado durante un ataque contra la ciudad ucraniana de Dnipro.
Putin ha dicho que es parte de la respuesta de Moscú a los ataques ucranianos en suelo ruso con sistemas de misiles tácticos del ejército suministrados por Estados Unidos, conocidos como ATACMS, y misiles Storm Shadow suministrados por Gran Bretaña.
Los detalles técnicos específicos del Oreshnik siguen siendo clasificados, pero según se informa está diseñado para aumentar la capacidad de supervivencia y la eficacia del arsenal nuclear de Rusia, particularmente en el contexto de los cambiantes desafíos de seguridad global.
Lazos fuertes
Lukashenko, el aliado más cercano de Putin desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022, ha permitido que su vecino utilice el territorio bielorruso como plataforma para la agresión.
La creciente integración militar de Bielorrusia con Rusia comenzó a ganar impulso a principios de la década de 2010. Esa alianza se institucionalizó entre los dos países en la década de 1990 a través del acuerdo del Estado de la Unión y solo se ha profundizado desde que Rusia anexó Crimea en 2014 y el estallido de la invasión de Ucrania por parte de Moscú en 2022.
Al convertirse el suelo bielorruso en base de misiles rusos, el valor estratégico de Bielorrusia se ha vuelto aún más pronunciado.
El país limita con estados miembros de la OTAN, incluidos Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, lo que lo convierte en un lugar crucial para los despliegues militares rusos, especialmente dadas las crecientes tensiones con Occidente por la agresión a gran escala de Rusia contra Ucrania.
Lukashenko también sugirió, sin proporcionar pruebas, que Bielorrusia mantendría el control sobre la selección de los objetivos que atacarían los Oreshniks. "Los objetivos los determinaremos nosotros en Bielorrusia, no los rusos", dijo, pero subrayó que las dos partes colaborarían en caso de necesidad militar.