Bielorrusia apela a la guerra híbrida para desestabilizar la UE
Según Varsovia, en los últimos días se ha registrado un aumento en el número de cruces ilegales en la frontera entre Bielorrusia y Polonia.
La ministra de Interior alemana, Nancy Faeser, y el viceministro polaco de Asuntos Interiores, Bartosz Grodecki, expresaron ayer su voluntad de estrechar la cooperación frente a la inmigración irregular y en defensa del espacio Schengen. Ambos políticos se manifestaron a favor de la cooperación bilateral en materia migratoria y suscribieron un acuerdo para extender controles fronterizos adicionales a los ya existentes, lo que implicará un incremento en las inspecciones a viajeros de ferrocarriles entre ambos países.
En relación con la situación que se vive en la frontera de Polonia con Bielorrusia, Grodecki enfatizó: "Debemos proteger el espacio Schengen, que es uno de los muchos pilares en los que se basa la Comunidad Europea". Y señaló que, en su opinión, "tanto (el presidente ruso) Vladimir Putin como (el bielorruso) Aleksander Lukashenko quieren desestabilizarlo, es su objetivo”.
"La operación de guerra híbrida continúa"
Según Varsovia, en los últimos días se ha registrado un aumento en el número de cruces ilegales entre Bielorrusia y Polonia. La semana pasada, el ministro polaco de Servicios Especiales, Stanislaw Zaryn, alertó de que, desde el comienzo de 2023, ha habido "más de 10.000 casos" de migración ilegal en ese punto, por lo que, afirmó, "la operación de guerra híbrida contra Europa continúa”.
"Alrededor de la mitad de las personas que ingresan ilegalmente a través de la frontera germano-polaca cada mes llega a través de Bielorrusia", ha calculado Andrea Lindholz, portavoz de la conservadora CSU para migraciones, para el diario ABC. "En un estado autocrático como ese, los cruces fronterizos a esa escala ciertamente no son una coincidencia, de manera que es lógico pensar que estas entradas ilegales son parte de una estrategia para desestabilizar la UE", ha agregado.
Lindholz, según el mismo medio, pide restricciones a las aerolíneas que facilitan la inmigración ilegal a través de Rusia y Bielorrusia. El horario de vuelos del aeropuerto de Minsk registra llegadas diarias desde Sharm el-Sheikh y Hurghada, así como desde Turquía y muy especialmente Rusia. La policía alemana ha contabilizado 1.330 entradas ilegales desde Egipto por esta ruta, el tercer grupo más numeroso después de las más de de 3.000 de Siria y 1.632 de Afganistán.