Analistas desvelan el talón de Aquiles de Putin con su guerra de desgaste
El Kremlin deberá enfrentar algunas limitaciones a medio y largo plazo.
El miércoles 16 de octubre el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, compartió a la Rada Suprema el Plan de la Victoria de Ucrania, con el que pretende ganar la guerra a finales de 2025, que incluye la promesa de colocar tropas de la OTAN en el flanco oriental para la defensa, una vez que acabe el conflicto en Ucrania. El objetivo de este nuevo plan es contrarrestar las intenciones de Putin y terminar el conflicto a corto plazo.
Por su parte, el líder Ruso cree que una guerra a largo plazo y de desgaste solo podría favorecer a Rusia, a pesar del apoyo occidental a Ucrania. Sin embargo, varios analistas militares del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) afirmaron que existen ciertas limitaciones a medio y largo plazo que pueden impedir que Rusia pueda sostener su ofensiva con el tiempo.
"Es probable que Putin y el mando militar ruso consideren mantener la iniciativa en todo el teatro de operaciones como una prioridad estratégica y se han mostrado tolerantes con operaciones ofensivas prolongadas que resulten en avances graduales y progresivos muy por debajo de sus objetivos previstos", aseguró el 'ISW', que considera que el esfuerzo constante de las tropas rusas por realizar ofensivas de forma indefinida, tan solo debilitará la mano de obra y recursos de Rusia, hasta el punto en el que tengan que reducir sus ataques en determinados sectores.
Mientras, el aún presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó que entregaría un nuevo paquete de ayuda militar para Ucrania, valorado en los 425 millones de dólares, después de mantener una llamada con el presidente de Ucrania, el miércoles 16 de octubre.
El Ministerio de Defensa de Corea del Sur, afirmó que se encuentra monitoreando "de cerca" la huella de las tropas norcoreanas, que apoyan a Rusia, después de conocerse que el ejército ruso estaría entrenando al menos 10.000 soldados de Corea del Norte.