Por segunda vez, el rey se olvida de 54 mujeres asesinadas
Llama la atención que ninguno de los líderes o portavoces de los más importantes partidos políticos haya reparado ayer, en sus comentarios sobre el discurso del rey, en la falta de sensibilidad que ha demostrado el monarca sobre la violencia machista.
Foto: EFE
No será porque no se lo haya recordado la más próxima actualidad. El día anterior, una mujer de Villena (Alicante) fue asesinada por un hombre con el que estaba vinculado sentimentalmente. Hacía el número 54 de las que que perdieron la vida a manos de sus maridos, exmaridos, parejas o exparejas a lo largo de 2015. El mismo número que el año pasado, a falta de una semana para que concluya el actual. Y sin embargo, ni el rey de España -con dos hijas en su matrimonio-, ni sus asesores más próximos, han reparado en un hecho como el feminicidio que, año tras años, se repite en nuestro país, sin que los Gobiernos que lo administran por turno bipartito sepan atajar semejante lacra. Además de esas 54 víctimas mortales, hay otros tres casos en investigación, según datos aportados por el Ministerio de Sandidad, Servicios Sociales e Igualdad. El número de menores que han quedado huérfanos de madre durante este año se cifra en 49. Tres niños han perdido la vida asesinados por sus padres o la parejas o exparejas de las mujeres asesinadas. Que un balance tan crecido de víctimas mortales de la violencia machista en España, repetido años tras año como si no tuviera remedio, no sea capaz de merecer unas cuantas líneas en el discurso navideño del jefe del Estado, ni en su estreno como tal en 2014, ni en 2015, deja a la Corona y a quienes deberían asesorar a su titular a muy baja altura. Es más, yo creo que -como en los casos en que se comete un error de tal entidad- la Corona debería pedir discupas por tan flagrante y notoria elusión.
PS.- Llama la atención que ninguno de los líderes o portavoces de los más importantes partidos políticos haya reparado ayer, en sus comentarios sobre el discurso del rey, en la falta de sensibilidad que ha demostrado el monarca sobre la violencia machista.