Los 7 segundos del CV
El número de parados gasta la misma velocidad que una bomba de película serie b, lo que ha provocado que nuestro CV no dure más de 7 segundos en las manos de los responsables de recursos humanos (RRHH) de cualquier empresa. Hay que facilitarles, en la medida de lo posible, la lectura.
El número de parados gasta la misma velocidad que una bomba de película serie b, lo que ha provocado que nuestro CV no dure más de 7 segundos en las manos de los responsables de recursos humanos (RRHH) de cualquier empresa. Es decir, que ahora disponen de menos tiempo para estudiar los cientos de currículums que reciben una vez se hace pública una oferta de empleo, por lo que ya no sólo cuenta tener un buen currículum, sino que hay que facilitarles, en la medida de lo posible, la lectura del mismo.
No se puede conocer con exactitud, pero se estima que la duración antes de la crisis era alrededor de 12 segundos. Esta media de tiempo sólo se emplea para aquellos que están adaptados al formato estándar, ese en el que la información se estructura dentro de los bloques de datos personales, apartado académico y profesional, idiomas y aptitudes, y por último, los "otros datos de interés".
Ese orden y cohesión facilita la lectura a los recruiters, lo que hará posible que nuestro CV no sea descartado en la primera criba. Jobandtalent analiza los cuatro puntos a tener en cuenta a la hora de redactar un CV para conseguir que sea estudiado por recursos humanos, y nos llamen para la entrevista y poder así profundizar sobre los mismos.
Aprovecha el espacio
La primera regla que se tiene que tener en cuenta es que al igual que sucede con un periódico, los encargados de analizar a los candidatos siempre van a mirar, en primer lugar, a la esquina superior derecha, es decir, hacia su izquierda. Por eso debemos concentrar ahí nuestros datos personales, de manera detallada y concisa. Ni un dato de más. Tendemos a querer conseguir la entrevista, lo que nos hace olvidar con facilidad que para que llegue esa situación primero debemos conseguir que nuestro CV sea leído. El espacio ocupado no destaca, por lo tanto procura no rellenar por rellenar. Eso automáticamente te descarta.
Cuidar el formato
Actualmente, los formatos en los que se envían los CV son iguales para todos (Word o PDF), por lo que ya no se cuenta con la ventaja de poder aportar algo distinto en cuanto al formato de CV. Esta situación hace que debamos focalizar lo más posible nuestro CV a la oferta a la que estamos respondiendo, ya que antes de conocer cualquier otro dato, las personas encargadas de analizar tu CV quieren conocer si eres el candidato idóneo y eso, empieza desde el momento en el que reciben tu CV. La manera en la que hemos estructurado nuestra vida académica y profesional es un elemento que puede aportar mucha información para RRHH, por lo que cada información debe estar integrada en el bloque correspondiente. Estudios, experiencia profesional, prácticas, idiomas, etc, todo, tiene un bloque del cual no se debe salir. Ni el chino de debajo de Plaza España tiene desorden en su carta, no lo hagas tú con tu CV. Debes saber priorizar la información que quieres destacar y facilitar la lectura del mismo.
Muchas veces, creemos que con el CV es suficiente, y no prestamos la misma dedicación a contestar a los application online que introducen algunas empresas antes de comenzar con la recepción de los curriculum. Es la primera prueba que adoptan para intentar descartar directamente nuestro currículum sin necesidad de abrir el archivo.
Qué puedes aportar
Muchas veces es fácil pensar que el curriculum es nuestra carta de presentación sobre lo que hemos hecho desde el día que la elaboramos hacia atrás, y por lo tanto, es difícil incluir una proyección futura que pueda llamar la atención del entrevistador. Lo cierto es que un CV siempre debe ser un documento presente con vistas a describir la que quieres que sea tu carrera profesional. Si definimos de manera técnica los cargos que hemos ocupado a lo largo de nuestra carrera profesional, con una explicación sencilla, ya estamos ofreciendo una primera impresión de lo que podemos aportar. El propio entrevistador debe saber que tú eres el candidato perfecto, pero además, que el puesto se ajusta a lo que tú quieres para tu plan de carrera. Es importante recordar que todo lo que presentes en el CV deberás saber defenderlo en una futura entrevista.
Conócete y conóceles
La mejor manera de exponer tus aptitudes y capacidades para un determinado puesto es reflexionar sobre las mismas antes de ponernos a redactar el CV. Esta acción deberá servirte para adquirir una capacidad sobre cuáles son las ofertas a las que debes responder en función de tus posibilidades y lo que se reclama. Cuando encontramos ofertas, en las mismas se describe lo que se espera del candidato, por lo que conocer si es una oferta interesante es más fácil.
En una época en la que las ofertas son cada vez más especializadas, la manera en la que las solicitamos debe estar cuidada al máximo por los candidatos. Todos queremos poner "dinamismo y creatividad" como skills a destacar dentro de nuestro CV, pero luego cada una de las ideas que aportamos a los entrevistadores debe ser refutada con datos y aptitudes. Ser creativo es mucho más que ponerlo en el CV.