La dinámica de grupo: Un candidato, el pato y cien caballos

Las entrevistas de trabajo han ido especializándose de tal manera que el candidato se enfrenta a su entrevistador, a cien caballos y un pato de carreras. El inicio es el mismo, ya que la entrevista conlleva una preparación de semanas, una investigación previa y análisis de cuáles son las aptitudes que se pretenden mostrar frente al entrevistador.

Además, no sólo se presenta una candidatura, sino que para desarrollar la carrera profesional, conviene conocer la empresa a la que tratas de acceder, y para ello, tú también preguntas. Las claves están claras, pero la crisis ha desarrollado aun más un modelo de entrevista como es la dinámica de grupo.

En torno al 60% de las empresas deciden aplicar la dinámica de grupo en sus procesos de selección, no cómo sustitución de las entrevistas entre la persona de recursos humanos y el candidato, sino como complemento dentro de proceso de selección. Se tiende a pensar que la entrevista personal es un proceso en el que el entrevistador tratará de descartar el mayor número de candidaturas, hasta dar con la que más se ajusta al perfil que busca la empresa, pero lo cierto es que se persigue conocer al total de candidatos que puedan encajar, para luego seleccionar sobre la muestra total. Por lo tanto, es un proceso en el que se profundiza en los datos aportados en el cv, contrastar los mismos y conocer más el conjunto de cualidades (no sólo profesionales) para saber si están en consonancia con la cultura empresarial de la empresa, y la adaptación que tendría el mismo.

Antes se decía "relájate y disfruta", expresión que dada la situación actual en España sólo quedaría como faldón de algún meme de Julio Iglesias. La dinámica de grupo es un ejercicio que las empresas utilizan fundamentalmente en dos direcciones; La primera, para detectar aquellos candidatos que muchas veces llevan la entrevista (y por tanto las respuestas) estudiadas, y poder así introducir un cambio de guión que le deje desnudos, para mostrarse tal y como son. La segunda, que permite conocer con mayor precisión la determinación que presentan los candidatos enfrentados entre ellos, con presión, y por tanto descifrar las virtudes y defectos de cada uno.

¿Qué perfil adoptan los responsables de Recursos Humanos en la dinámica de grupo?

Esta actividad se centra en conocer las habilidades verbales, de análisis y reflexión de cada uno de los candidatos. Hay que destacar que las personas encargadas de realizar la entrevista ya tienen una primera impresión sobre nuestra capacidad comunicativa, pero buscan profundizar en el desarrollo de la misma frente a un grupo de personas. Las entrevistas grupales más empleadas son aquellas en las que se expone un tema para que los participantes traten de debatir sobre el mismo.

La crisis ha provocado que se esté produciendo un cambio en la manera de afrontar éstos ejercicios por parte de los candidatos, ya que la falta de oportunidades, en muchos casos ha facilitado que la dinámica de grupo identifique de mejor manera a los candidatos, expuestos a momentos de tensión producidos por tener que competir entre ellos. Hace años, la obra de teatro (y posterior adaptación al cine) El método Grölhom suponía una adaptación histriónica de lo que podía ser una dinámica de grupo para perfiles directivos en multinacionales, muchas veces exaltando las dotes de cada uno de cara al objetivo: adquirir el puesto de trabajo. No hay que traer al texto la idea de la ficción, pero sí explicar la importancia que cada vez más está teniendo la dinámica de grupo como proceso de selección.

Cara a cara con otros candidatos

Existe un problema común entre la mayoría de los perfiles que se presentan a un determinado puesto de trabajo, y pasan por un proceso de dinámica de grupo. Quien mayor presencia tiene, y por tanto, más habla dentro de la misma, no tiene las mayores papeletas para terminar siendo el candidato elegido. Uno de los elementos que más se valoran por parte de las personas de recursos humanos dentro de las entrevistas grupales es la capacidad de escuchar que tienen los participantes. En la misma, se denota una aptitud reflexiva, una capacidad analítica y un ejercicio completo a la hora de comunicar.

Ya a la hora de exponer una postura entran en juego otros factores como son la persuasión, la elegancia con que se presenta una opinión y la empatía que se establece con el resto de participantes en la dinámica de grupo.

En último lugar, y como se trata de presentar una serie de ideas sobre un tema a debatir, o bien solucionar un problema, hay que saber tener una capacidad para sintetizar lo expuesto. Esto nos permitirá pedirles al resto de candidatos una aportación o valoración sobre la línea argumental que se ha seguido, y cerrar el círculo de valoraciones que entran en jaque durante la dinámica de grupo.

La situación y la alta competitividad que se está dando en el mercado laboral obliga a las empresas a dotar a sus departamentos de Recursos Humanos del mayor número de herramientas posible que les permitan seleccionar los perfiles que más se ajustan al puesto que reclaman, por lo que se darán situaciones en las que el candidato deberá escoger entre un pato con tamaño de caballo, o cien caballos con tamaño de pato. Si vence, llegarán las entrevistas grupales o dinámicas de grupo.