Villarejo: "Yo tuve contacto con el señor Rajoy directamente en esta operación"

Jueves de lodo para Mariano Rajoy. El hombre clave de las cloacas del Estado, el excomisario de policía José Manuel Villarejo, ha apuntado en el Congreso al expresidente del Gobierno como urdidor de la operación Kitchen: “Yo tuve contacto con el señor Rajoy directamente en esta operación”. Y pese que no ha aportado prueba alguna, ha advertido, amenazante: “Todo está en mis archivos”.

La vuelta por la Carrera de San Jerónimo de uno de los hombres más señalados por el poder como urdidor de todo tipo de conspiraciones ha servido para acorralar al PP por sus escándalos corruptos y sus supuestas ilegalidades. Y la oposición ha sacado partido a las ganas de hablar de Villarejo, tan dispuesto y dicharachero, que ha hecho las delicias de varios portavoces parlamentarios, algo que ha reconocido el de EH Bildu, Jon Iñarritu:

- “Usted ha venido aquí y nos lo hemos pasado bien”.

Villarejo, tras haber insinuado en una entrevista en El País que fue el propio exjefe del Ejecutivo quien ordenó la operación organizada supuestamente por el Ministerio del Interior para espiar e incautar información sensible para el PP al extesorero del partido Luis Bárcenas, ha reconocido que tenía un teléfono con el que se comunicaba directamente con el expresidente Rajoy.

El excomisario ya había empezado su comparecencia diciendo que dudaba de que el expresidente popular desconociera la Kitchen, según ha respondido al portavoz del PSOE, quien la ha preguntado si “es posible que Rajoy no conociera nada”.

Lo cierto es que Villarejo cree que el interés de Rajoy en montar Kitchen no estaba tan orientado a la obtención del supuesto material sensible para el PP en manos de Bárcenas, sino el que podía mover los cimientos del Estado: “Bárcenas decía que tenía información muy sensible para altas instituciones del Estado y el interés del presidente estaba ahí”.

Villarejo, que ha aparecido sin su característica boina y con mascarilla negra —y que no se ha quitado—, ha quitado todo significado peyorativo a la palabra “cloaca”, como si defendiera la existencia de un mundo paralelo de operaciones oscuras en el corazón mismo del poder: “Las cloacas depuran, no generan inmundicia”, ha espetado.

Villarejo está procesado por sus actividades ilegales como agente y ha pasado tres años y medio en prisión preventiva. El sumario del caso Kitchen está plagado de conversaciones grabadas por él sobre la supuesta trama urdida en 2013 bajo el mando de Jorge Fernández Díaz en Interior y de Dolores de Cospedal en la secretaría general del PP, con quienes también ha reconocido despachar el asunto.

“La operación Kitchen la consideré como una operación de inteligencia, no solo para encontrar documentos que podían comprometer al PP, sino que Bárcenas podía tener documentación que comprometiera a altas instituciones del Estado”, ha detallado Villarejo.

El comisario jubilado ha afirmado que “el propio Rajoy tenía interés”, porque afectaba a su partido y al Estado mismo. “En base a eso, el propio Rajoy contactaba conmigo. En ocasiones me preguntaba cosas, además del circuito oficial [...]”. El problema es que la versión que ha dado Villarejo contradice la que ha mantenido hasta ahora y que decía que nunca habló personalmente con Rajoy.

El PP, aprovecha para desacreditar la investigación de la Gürtel

El portavoz del PP ha aprovechado su turno de intervención en la comisión para intentar desacreditar la investigación de la trama Gürtel. “Fue una operación política perfectamente orquestada”, ha lanzado el diputado del PP, quien ha obviado la media docena de sentencias que han condenado a la trama liderada por Francisco Correa. Es más, las resoluciones judiciales dejan un reguero de 67 condenados, 25 de ellos excargos populares. El PP está condenado en firme por el Supremo por beneficiarse de la red de corrupción.

Villarejo, que se ha mostrado muy educado y ha elogiado a Cataluña —por su papel de pueblo emprendedor—, ha confesado al portavoz de ERC, Gabriel Rufián, que trataron de asesinarlo en prisión: “Me intentaron eliminar”. Y poco después ha detallado que le dieron una “sustancia”: ”¿Sabe lo que me dijo el médico forense?: ’Eso ha sido un medicamento que te ha sentado mal”.

Tanto ERC como Junts han insistido a Villarejo con la conocido como operación Cataluña, la campaña mediática encaminada y, supuestamente, informativa engendrada en el Ministerio del Interior para desacreditar a los principales dirigentes del independentismo catalán.

Los dos partidos independentistas han querido saber si el excomisario la conocía y participó en ella.

-”¿Le pagaron por ello?”

- “Lamentablemente no. Al contrario. Adelanté dinero. En la Operación Cataluña, mi función fue de trabajos de inteligencia. Era un ataque a la unidad nacional”. “Es curioso un país en donde insultan a uno llamándole patriota”.