Los jugadores de la selección española de fútbol están en la diana por el partido que hicieron ante Polonia (1-1) y que les complica el pase a las eliminatorias de la Eurocopa, y por su actitud ante los aficionados.
Por otro, la de muchos de sus compañeros, que este sábado, antes del partido contra Polonia, apenas se fijaron en la cantidad de gente, muchos de ellos niños, que esperaban a la puerta del hotel de concentración en Sevilla para darles apoyo.
Entre los numerosos mensajes dirigidos a los jugadores entrenados por Luis Enrique, se ha viralizado un tuit que compartía una anécdota contada por Jorge Valdano, comentarista y exentrenador argentino, sobre la humildad:
“Un día, en un entrenamiento que se hizo largo, todos empezamos a quejarnos en coro: ‘Esto ya lo sabemos, estamos cansados, llevamos dos horas aquí’… lo clásico, pero todo el equipo con la misma cantinela.
El entrenador dio por terminado el entrenamiento y nos llevó al hotel en el que estábamos concentrados y al día siguiente, a las 5:00 de la mañana nos despertó. Llegamos todos a recepción con intención de ir al desayuno, nos dijo que de ninguna manera, que al autobús.
Pensábamos que había preparado una sesión de castigo, que estaba muy en el estilo de su dirección. El autobús salió del hotel y paró a 400 metros, justo a la entrada de la boca de metro, donde fuimos espectadores de un auténtico espectáculo, pues nunca la habíamos visto a esa hora de la mañana. A esa hora había gente humilde entrando y saliendo. Ahí estuvimos en silencio viendo ese espectáculo social.
A la hora, el entrenador se levantó y dijo: ‘Esta gente sale de casa a la mañana cuando sus hijos están dormidos y vuelven por la noche cuando sus hijos ya están durmiendo. No me vuelvan a decir que el entrenamiento es largo’. Bueno, yo no recuerdo un autobús más silencioso en el regreso al hotel”.
A estos futbolistas niñatos millonarios que salen del hotel y ni saludan ni siquiera miran a la gente, a los niños que llevan ahí horas para verlos, les haría falta un Bilardo que les hiciera esto. Lección de vida. pic.twitter.com/8xVrrKqOfJ
Eso sí es una clase, pero no solo para los futbolistas millonarios de hoy en día, sino para esa generación de jóvenes ninis que estamos fabricando. https://t.co/Fp96JWjtVR