Una experta en estética política subraya lo que hace Carlos III aquí: "A la reina la hubieran tenido que obligar a eso"
"Estando de luto...".
Patrycia Centeno, asesora en estética política y corporativa, ha destacado la escena que ha protagonizado este viernes Carlos III tras la muerte de su madre, la reina Isabel II.
El monarca ha mostrado una imagen de cercanía y amabilidad al dar la mano y saludar personalmente a los cientos de admiradores que esperaban su llegada desde Escocia a las puertas del palacio londinense de Buckingham.
“Carlos no es Isabel. Lo primero que ha hecho al bajar del coche en Buckingham es saludar a la gente que le esperaba”, ha señalado la experta.
Y ha agregado: “Estrecha manos y sonríe y lleva un buen rato. Estando de luto, a la reina la hubieran tenido que obligar a hacer algo así”.
Vestido de traje oscuro, el primogénito de Isabel II y el príncipe Felipe intercambió palabras con la multitud, que le sonreía con afecto y en algún momento entonó los primeros versos del himno nacional, que ha cambiado el vocablo reina por el de rey al implorar “God Save The King”.
El rey, de 73 años, pasó un largo rato recorriendo las filas de simpatizantes situados detrás de las vallas, protegido de cerca por su equipo de seguridad.
Después repasó con Camila, la reina consorte, las flores depositadas en honor de su madre, fallecida el jueves a los 96 años en el castillo escocés de Balmoral.