Ucrania y Rusia avanzan en un texto con 15 puntos para detener la guerra de inmediato
Según adelanta 'Financial Times', este acuerdo llevaría aparejadas duras exigencias contra el Gobierno de Kiev.
Más cerca de un posible final de la guerra. Tanto Kiev como Moscú han transmitido mensajes optimistas en las últimas horas y, ahora, una información del diario británico Financial Times adelanta que estas sensaciones podrían plasmarse en un documento de 15 puntos.
Según cita el medio, ambas delegaciones están acercándose a un acuerdo en torno a un texto que implicaría el alto el fuego inmediato y la retirada de todas las tropas rusas, siempre que se acepten las condiciones.
Desde dentro de la reunión, el negociador ucraniano ha compartido unas “breves” reflexiones tras conocer la publicación de este borrador. Majail Podolyak ha explicado que este documento “representa la posición solicitante de la parte rusa. Nada mas”. “Ucrania tiene sus propias posiciones. Lo único que confirmamos (entre sus exigencias) en este momento es un alto el fuego, la retirada de las tropas rusas y garantías de seguridad de varios países”.
Podolyak insiste en que la única solución a la guerra es una reunión al más alto nivel entre Zelenski y Putin, que según su versión van a verse personalmente “pronto”. “La única opción para acabar con esta guerra son conversaciones directas entre los dos presidentes, y en eso es en lo que trabajamos con estas negociaciones”, ha añadido en una entrevista con la cadena estadounidense PBS.
En el último día, y tras dos jornadas de negociaciones entre “pausas técnicas”, Rusia y Moscú han reconocido abiertamente los avances en la vía diplomática. El titular de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha llegado a decir que ese pacto “está cerca”, unas declaraciones respaldadas, en otro tono, por el presidente ucraniano. Para Zelenski la situación empieza a ser “más realista”, tras varias intentonas sin resultados concretos.
Lo que exige Moscú
De momento, solo se conocen algunas claves de estos 15 aspectos que discuten Kiev y Moscú. Entre los puntos sabidos, está la exigencia rusa de que Ucrania renuncia definitivamente a entrar en la OTAN. Pero esto, que ayer prácticamente asumió Zelenski en una reunión con la alianza atlántica, iría más allá, porque la condición es que también se declare país neutral y renuncie a albergar bases militares o armamento extranjero.
Moscú exige, por otro lado, que se reconozca la pertenencia de Crimea al territorio ruso y la independencia de las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk —como proclamó Putin en la antesala de la invasión—.
Estas dos cuestiones han sido constantemente rechazadas por el Gobierno de Volodimir Zelenski, aunque fuentes internas citadas por el Financial Times dejan entrever negociaciones también en esto.
Las garantías a Ucrania
A cambio, Ucrania mantendría garantías de protección por aliados como EEUU, Reino Unido o Turquía. Según la hoja de ruta planteada por Moscú, Kiev podría mantener sus fuerzas armadas, pero únicamente si permanecen al margen de alianzas militares con otros países.
Las conversaciones avanzan, pero no tendrán resultados inmediatos. La delegación ucraniana no acepta la imposición del carácter de ‘país neutral’, puesto que consideran que el modelo debe ser “propio”, sin inspirarse en los propuestos por Moscú (Austria o Suecia, por ejemplo).
Además, este posible acuerdo coincide en el tiempo con las nuevas declaraciones de Vladimir Putin, que insiste en que la invasión está “justificada plenamente” para lo que llama liberar Crimea y el Donbás y además “se desarrolla con éxito”, negando de nuevo toda intención de ocupar Ucrania.
La realidad sobre el terreno mientras las partes negocian
No hay ningún signos que inviten a pensar en una cierta desescalada bélica en estos momentos. Los servicios de información ucranianos han denunciado la matanza, a tiros, de una decena de personas que esperaban a las puertas de una panadería esta mañana en Chernígov, cerca de la frontera con Bielorrusia.
Mariúpol ha vuelto a ser blanco de un bombardeo indiscriminado, como han denunciado las autoridades locales. Según estas, Rusia ha bombardeado un teatro que servía de refugio a cientos de civiles. Aún no hay información sobre posibles víctimas.
Tampoco se rebaja la tensión en torno a la capital, que continúa bajo el toque de queda y sometida por las bombas, igual que Járkov, donde se contabilizan nuevos muertos civiles por las explosiones.