Trump cancela su viaje a Dinamarca por la negativa de su Gobierno a venderle Groenlandia
Y claro, los políticos daneses alucinan.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anulado una reunión con la primera ministra danesa prevista para dentro de dos semanas debido a su falta de interés en vender Groenlandia, un territorio con abundantes recursos naturales.
La visita a Dinamarca del presidente estadounidense ha sido simplemente “anulada”, ha explicado a la agencia AFP un portavoz de la Casa Blanca tras la publicación de varios tuits de Trump.
La casa real de Dinamarca, que había cursado la invitación a Trump, expresó su “sorpresa” en un mensaje escrito difundido por la televisión pública danesa DR.
El conjunto de los políticos daneses expresaron su estupefacción por la decisión del presidente estadounidense.
“La realidad trasciende la ficción”, este “hombre es imprevisible”, ha declarado en un tuit Martin Østergaard, dirigente de la izquierda radical que forma parte de la mayoría parlamentaria.
“Sin ninguna razón, Trump considera que una parte (autónoma) de nuestro país está en venta. Luego anula de manera insultante una visita que todos estaban preparando. ¿Hay parte de Estados Unidos en venta? ¿Alaska?”, ha reaccionado indignado en Twitter el dirigente conservador Rasmus Jarlov.
“Por favor, más respeto”, ha agregado Jarlov.
“Dinamarca es un país muy especial pero en base a los comentarios de la primera ministra Mette Frederiksen sobre que no tendría ningún interés en discutir la compra de Groenlandia, postergaré para otro momento nuestra reunión prevista para dentro de dos semanas”, ha tuiteado Trump.
“La primera ministra ahorró una gran cantidad de gastos y esfuerzos tanto a Estados Unidos como a Dinamarca al ser tan directa. Se lo agradezco y espero que la reprogramemos en algún momento en el futuro”, ha escrito el presidente al referirse a la visita.
El anuncio se produce en vísperas de que el presidente estadounidense viaje a Francia para participar en la cumbre del G7 en Biarritz del 24 al 26 de agosto.
Existe el temor de que Trump haga de aguafiestas en esa reunión en la que se tratarán numerosos temas en los cuales Estados Unidos tiene diferencias con sus aliados tradicionales.
Hace unos día, The Wall Street Journal reveló que Trump había comentado su interés en que Estados Unidos comprara Groenlandia, una región de Dinamarca, cuya mayor parte está cubierta de hielo, de 55.000 habitantes y con un gobierno autónomo.
El domingo, Trump confirmó su interés en comprar Groenlandia pero dijo que esta operación, que calificó de “gran negocio inmobiliario”, no era una de las prioridades de su administración.
“Es algo de lo que hablamos”, ha dicho a Trump a los periodistas, aclarando que ‘no era para nada’ el motivo del viaje a Dinamarca previsto en septiembre y que acaba de anular.
El capricho de Trump
La ambición de Trump no cayó bien en el gobierno de Groenlandia. El Ministerio de Asuntos Exteriores insistió el viernes en que la isla estaba dispuesta a hablar de negocios, pero no en venta.
″#Greenland es rico en recursos valiosos como minerales, el agua y el hielo más puros, reservas de pescado, mariscos, energía renovable y es una nueva frontera para el turismo de aventura”, tuiteó. “Estamos abiertos a los negocios, no en venta”.
Groenlandia es una gigantesca isla ártica rica en recursos naturales (petróleo, gas, oro, diamantes, uranio, zinc y plomo).
Es la segunda vez que Trump menciona en su cuenta Twitter la compra de Groenlandia.
“Prometo no hacer esto en Groenlandia”, dijo Trump el lunes en un tuit con un fotomontaje donde se veía su inmenso hotel de Las Vegas en medio de un paisaje bucólico de ese territorio autónomo danés.