Siete policías de Nueva York suspendidos tras la difusión de otro video de abusos mortales
“Trabajaremos incansablemente para lograr la transparencia y la rendición de cuentas que merece toda nuestra comunidad”, dice la fiscal
El nombre de Daniel Prude se ha sumado esta semana a la lista pública de presuntas víctimas de abusos policiales en Estados Unidos, a raíz de la difusión de las imágenes de su arresto, en marzo, en la localidad de Rochester (Nueva York). Acabó muriendo siete días después. Siete agentes han sido apartados este jueves de sus puestos de forma temporal. La familia de Prude divulgó el miércoles las imágenes de la detención, en las que se aprecia cómo los agentes encapuchan al hombre, negro, y presionan su cara contra el suelo.
El caso está bajo investigación de la Fiscalía desde el mes de abril, pero hasta ahora apenas había trascendido ni las autoridades habían adoptado medida alguna.
La alcaldesa de Rochester, Lovely Warren, ha anunciado este jueves la suspensión de siete agentes, mientras que el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha exigido “respuestas” ante unas imágenes que considera “muy preocupantes”, según el diario The New York Times.
La fiscal estatal, Letitia James, que el miércoles realizó su primera valoración pública, ha prometido llevar a cabo una investigación “justa e independiente”, recordando que estas pesquisas comenzaron poco después de la muerte de Prude. “Trabajaremos incansablemente para lograr la transparencia y la rendición de cuentas que merece toda nuestra comunidad”, ha declarado.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, por su parte, exigió este jueves respuestas por la muerte de Prude, un caso ha derivado en críticas similares a las que ya se pudieron escuchar con las muertes de George Floyd o Breonna Taylor, o más recientemente con el tiroteo que ha dejado inmóvil de cintura para abajo a Jacob Blake, que se recupera en un hospital de los siete disparos recibidos por la espalda en Kenosha (Wisconsin).
“Anoche vi el video de la muerte de Daniel Prude en Rochester. Lo que vi fue muy alarmante y demando respuestas”, dijo Cuomo en un comunicado. Cuomo reclamó que la investigación se complete cuanto antes y pidió al Departamento de Policía de Rochester plena cooperación.
Los hechos
Prude murió el 30 de marzo, una semana después de ser detenido, cuando se le retiró el soporte vital que se le había aplicado después de llegar maltrecho al hospital.
Según los medios, los policías respondieron a una llamada de su hermano, después de que Prude saliese corriendo de su casa en un estado errático y con síntomas de algún tipo de problema mental.
El hombre había sido trasladado a un hospital el día anterior después de que aparentemente comenzara a experimentar problemas de salud mental, según muestran los informes policiales.
En los videos hechos públicos por la familia, tomados por las cámaras que llevan los agentes en sus uniformes, se ve a Prude, que se había desnudado, con las manos detrás de la espalda, esposado y gritando antes de que la policía le tapara la cabeza con una capucha, aparentemente para evitar que les escupiera, ya que había gritado que tenía coronavirus.
Después de dos minutos, Prude ya no se movía ni hablaba, por lo que se decide llamar a los servicios médicos de urgencia, que le practican maniobras de reanimación y le trasladan a un hospital.
El médico forense del condado de Monroe dictaminó que la muerte de Prude fue un homicidio causado por “complicaciones de la asfixia en el marco de la restricción física”, según un informe de la autopsia.
El “delirio excitado” que padecía el fallecido y la intoxicación aguda por varios fármacos que había tomado fueron también factores que contribuyeron a su estado, según el informe.