Siete lugares de infarto en España
Para los amantes de la adrenalina.
Si hay alguna cosa por la que España destaque es por los contrastes entre sus paisajes y sus regiones. De norte a sur, hay cantidad de puntos desde donde observar estos cambios y los espectaculares paisajes naturales que esconden. De hecho, la belleza del patrimonio natural y la grandeza del patrimonio histórico que se reparte por todo el país hace que sea uno de los destinos preferidos por millones de turistas.
Para poder verlo entero, no se nos ocurre mejor idea que llegar hasta los puntos más altos de la geografía española para tener una panorámica completa.
Aviso: los que sufren de vértigo, que lean con cuidado para no marearse. Para los que buscan adrenalina, no se pierdan detalle de esta lista.
1. Mirador del Fitu, Arriondas (Asturias)
No se puede empezar esta lista desde otro punto que no sea este: uno de los miradores más bonitos de España, ubicado en el pueblo asturiano de Arriondas.
Desde esta visión 360º sobre los acantilados del Alto de la Cruz, podrás contemplar cómo se unen el mar y las montañas, alcanzando los Picos de Europa o la Reserva Natural del Sueve, entre otras maravillas. No tiene desperdicio.
2. Mirador del Río, Lanzarote
Ubicado en la isla de Lanzarote, nos encontramos con otro de esos lugares que no puedes dejar de visitar, obra del artista César Manrique.
Desde la zona del risco en el macizo de Famara, y en forma de acantilado, el corazón se acelera ante los casi 500 metros sobre el nivel del mar, en el que tendrás una panorámica espectacular del archipiélago Chinijo.
3. Puente Nuevo, Ronda (Málaga)
Es uno de los lugares más espectaculares de la provincia de Málaga, y también más emblemáticos. Este puente sobre el Tajo representa la unión entre el barrio histórico y la zona moderna.
Seguro que has visto alguna foto de este lugar, pero nada comparable a asomarse desde él. Se encuentra a más de 100 metros de altura y mirar abajo se hace difícil. Además, merece la pena visitar el puente por la estructura en sí misma, que tiene como material principal la piedra de la zona.
4. Las Escaleras de Montfalcó, Montfalcó (Huesca)
La provincia de Huesca esconde uno de lugares perfectos para los adictos a las alturas. Solo apto para aventureros, esta ruta te ofrece caminar en pleno desfiladero por unos 291 escalones que unen la localidad con el Congost de Mont Rebei, en la provincia de Lleida.
Son dos tramos que te harán un nudo en el estómago, desde los que, si consigues reunir el valor para mirar hacia abajo, vas a alucinar con las vistas.
5. La Faja de las Flores, Torla-Ordesa (Huesca)
En esta ruta por senderos aptos para aventureros, no nos despegamos de Huesca. Allí se encuentra la Faja de las Flores, otro de esos caminos que da verdadera impresión. Esta ruta de 15 kilómetros a más de 1.000 metros de altura por el Valle de Ordesa solo es apta para valientes.
Pero dentro de este camino, lo que verdaderamente te pondrá los pelos de punta son los 3 kilómetros que sobresalen en la roca, como si de un auténtico balcón se tratase, llegando incluso a necesitarse cuerdas y clavijas para andar por él.
6. Pozo de los Humos, Masueco y Pereña de la Ribera (Salamanca)
En este enclave natural de la provincia de Salamanca el agua es absolutamente protagonista. Desde el Pozo de los Humos, ubicado dentro del Parque Natural de Arribes del Duero, podrás admirar la fuerza con la que el río Uces sale unos 50 metros en caída libre. Una catarata espectacular en pleno corazón de Castilla.
7. Teleférico de Fuente Dé, Liébana (Cantabria)
Terminamos nuestra ruta de infarto en Cantabria, una comunidad donde disfrutar de la panorámica y de los paisajes verdes tiene otro concepto. Este teleférico es el más largo de Europa en un único tramo, y bajo las cabinas acristaladas se puede divisar una vista espectacular del perfil de la comarca de Liébana.
Si te atreves a subir hasta los 1.850 metros que alcanza, podrás ver los Picos de Europa de maravilla. Al final, tiene sus recompensas.