¿Se puede tirar el tampón al váter? Las consecuencias para el medio ambiente
Lo ideal es optar por productos reutilizables.
Puede que entre el dolor, el sangrado intenso y la incomodidad de tener la regla, el medio ambiente no sea la principal preocupación de una mujer durante la menstruación.
Sin embargo, la regla puede causar estragos en la naturaleza. El uso de productos como compresas o tampones genera unas 200.000 toneladas de basura al año en Reino Unido, según Women's Environmental Network.
Los dos errores principales son tirar ciertos productos por el retrete y usar productos que contengan plástico (como los tampones y los aplicadores) en lugar de otras alternativas biodegradables. A continuación se incluyen algunos consejos para asegurarse de que se están desechando estos productos de forma adecuada:
No creas siempre lo que ponga en la etiqueta
Por mucho que un producto higiénico esté marcado como biodegradable o desechable por el inodoro, no quiere decir que sea buena idea tirarlo ahí. Lo mismo ocurre con los tampones. Debido a la gran cantidad de tiempo que tardan en deshacerse, acaban contribuyendo a los centenares de miles de atascos de alcantarillas que pueden producirse cada año en un país. En Reino Unido, por ejemplo, se registran unos 370.000 al año, y el 80% de ellos están provocados por grasas, aceites, toallitas, residuos sanitarios y otros productos que no deben tirarse por el váter, señala Water UK.
De modo que, aunque se usen tampones libres de plástico, es esencial tirarlos a la basura, y nunca por el retrete.
Emplear aplicadores biodegradables
Los plásticos de un solo uso son muy comunes en las marcas más populares de tampones, en su embalaje e incluso en el interior de los tampones.
Es aconsejable buscar marcas de tampones que dispongan de aplicadores de cartón o papel biodegradables o que, directamente, prescindan de aplicadores.
Priorizar los productos reutilizables
Tal vez no sea la primera opción en la que piensan las mujeres cuando tienen la regla, pero usar productos sanitarios reutilizables contribuye a reducir la cantidad de basura producida. La Women's Environmental Network de Reino Unido señala que la copa menstrual es la opción más acertada, dado que lo único que tiran sus usuarias es la sangre y nada más. Apenas se produce basura.
Además, este producto está fabricado con materiales muy sostenibles —las hay de arenisca, uno de los recursos más abundantes del planeta, o de goma biodegradable—.
La importancia de separar los residuos
Al igual que en la cocina, es fundamental separar la basura del baño según el contenedor de destino. Los productos menstruales deben ir a parar a un vertedero. Natalie Fee, fundadora de la campaña medioambiental City to Sea, recomienda disponer de dos papeleras en el baño.
"Una de ellas se usará para depositar toallitas, algodones y productos para la regla, y otra para objetos reciclables. Pese a lo que digan las etiquetas, en la actualidad no existen productos que realmente puedan tirarse por el retrete. Por tanto, usar dos papeleras es la mejor apuesta", sugiere la experta.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Reino Unido y ha sido traducido del inglés por María Ginés Grao.