Policía Nacional y Guardia Civil tendrán grupos específicos de delitos de odio
Además, se aplicará un protocolo para evaluar el riesgo de estas víctimas, como ya se hace en la violencia de género.
Policía Nacional y Guardia Civil contarán con grupos específicos contra los delitos de odio dentro de sus unidades de información. Este es uno de los principales acuerdos alcanzados tras la reunión de la Comisión de seguimiento del Plan de acción contra los delitos de odio, presidida por Pedro Sánchez.
En ambos cuerpos, además, se desarrollarán herramientas para evaluar el riesgo de estas víctimas, como ya se hace en los casos de violencia de género.
La reunión se convocó de urgencia a comienzos de esta semana tras conocerse una denuncia de una agresión homófoba en Madrid que acabó siendo falsa. Pese a que el relato fue inventado, Sánchez decidió mantenerla ya que, como declaró, “la denuncia falsa no puede impedir describir la realidad que sufren muchas personas LGTBI”.
En el encuentro, según ha informado el Ministerio del Interior en un comunicado este viernes, se han analizado los ejes del segundo plan de acción, que estará vigente entre 2022 y 2024 y que se centrará en la asistencia y el apoyo a la víctimas de los delitos e incidentes de odio, que han experimentado un crecimiento constante en torno al 9 % anual desde 2014.
Entre otras medidas, se crearán grupos específicos dentro de la Comisaría General de Información y de las brigadas provinciales de Información de la Policía Nacional, así como en la Jefatura de Información de la Guardia Civil y en unidades periféricas. Se reforzarán también los mecanismos de coordinación entre las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado con las policías autonómicas y locales y se incidirá en la prevención del delito con herramientas de evaluación de riesgo, un procedimiento que ya se aplica en el sistema VioGén de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género.
Aumentarán los recursos personales de la Oficina Nacional de Lucha contra los Delitos de Odio, creada en 2018 y se mantendrán iniciativas ya incluidas en el primer plan, como la formación y sensibilización de los miembros de las fuerzas y cuerpo de seguridad.
Marlaska pone el foco en el “antigitanismo”
Durante su intervención, el ministro Fernando Grande-Marlaska ha incidido en la importancia de la colaboración con organizaciones e instituciones y ha apuntado la necesidad de trabajar “específicamente” para atajar los delitos de odio motivados por antigitanismo, que sufrieron un incremento superior al 57 % en 2020. Junto a él han participado mandos de Policía Nacional y Guardia Civil, del Ministerio de Igualdad, la Fiscalía, el Observatorio Español Contra el Racismo y la Xenofobia, la Federación Estatal de Municipios y Provincias y asociaciones representantes de distintos colectivos.
Tras el encuentro, la directora general de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, Boti G. Rodrigo, ha urgido a la tramitación del anteproyecto de ley trans y de derechos LGTBI impulsado por Igualdad, que debe aprobarse “de manera rápida”, con el consenso de todos los ministerios y por unanimidad. Además, ha subrayado la importancia de que Interior e Igualdad trabajen “de la mano” para dar solución a los problemas de las personas LGTBI. “Las agresiones están siendo muy dolorosas y tenemos que poner solución a esta lacra de la forma más urgente posible”, ha denunciado.
Por su parte, la presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB), Uge Sangil, ha pedido un pacto de Estado contra los discursos de odio “que señalan, estigmatizan y culpabilizan a los grupos vulnerables”, convencida de “la semilla de los delitos de odio son los discursos de odio”.
A su juicio, todos los partidos firmantes deberían comprometerse a evitar señalamientos o propuestas de recorte de derechos hacia los grupos vulnerables, sean inmigrantes, gitanos, menores no acompañados o personas LGTBI y a censurar públicamente a quien “cruce la línea”.
Almeida pide, otra vez, “no estigmatizar a Vox”
En el centro de muchas críticas se ha situado esta semana Vox, cuyo presidente, Santiago Abascal, ha vuelto a defender este viernes a su partido ante quienes le acusan de difundir esos mensajes de odio. “Nosotros no odiamos ni a los homosexuales ni a los inmigrantes ni a las mujeres; nosotros a quien detestamos es a la izquierda, es al Partido Socialista y es a Podemos, y eso tiene un precio: cuando uno se enfrenta a la dictadura de la corrección política, sufre todo tipo de insultos y de demonizaciones”, ha dicho en una entrevista en Telecinco.
El alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, ha rechazado también de nuevo “estigmatizar a Vox”, como a su juicio “se pretende desde el Gobierno”, si bien ha aseverado que no comparte su postura en cuestiones como la violencia de género o la inmigración.
Ha reprochado además a Sánchez que decidiera convocar y presidir la comisión cuando todavía no se había acreditado la veracidad de la denuncia -un joven aseguró que ocho encapuchados le habían agredido en el barrio de Malasaña y le habían grabado en el glúteo la palabra “maricón”- y le ha instado a actuar del mismo modo “siempre que pase una actuación de odio” y no “precisamente por ser en Madrid”. “En Madrid nosotros no percibimos que haya un problema real en el ámbito de lo que es el aumento de los delitos de odio”, ha sostenido el regidor.