Phone House realizará un ERE que afectará a unas 150 tiendas
La empresa de tiendas de telefonía móvil llevará a cabo un despido colectivo una vez finalizado el ERTE.
El gran temor de muchos trabajadores durante el confinamiento era que su suspensión de trabajo temporal a través de un ERTE se convirtiera finalmente en un despido definitivo mediante un ERE. Este miedo se ha hecho realidad para muchos trabajadores de la empresa de tiendas de telefonía móvil Phone House.
La dirección de esta compañía, propiedad del grupo Dominion, ha comunicado este viernes a los representantes de los trabajadores su intención de llevar a cabo un proceso de despido colectivo, es decir, un expediente de regulación de empleo (ERE).
La empresa no ha informado de cuántos trabajadores se verán afectados por el despido colectivo. Sin embargo, el comunicado sí especifica que afectará a 148 centros de trabajo: el centro logístico de Coslada, 146 tiendas y un centro de soporte en Madrid.
Cada establecimiento de la compañía cuenta con entre cuatro y ocho empleados, dependiendo de las dimensiones y del horario del mismo.
El despido colectivo se llevará a cabo tras haber finalizado el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) aplicado durante la pandemia y que ha estado vigente desde el 14 de marzo al 30 de septiembre.
“El ERTE de fuerza mayor no ha sido una medida suficiente para paliar la grave situación económica y productiva en la que se encuentra actualmente nuestra compañía, con motivo de la excepcional situación económica negativa que está atravesando la empresa, no solo por la situación generada por el covid-19 sino por la que ya se venía arrastrando con anterioridad”, señala la firma en el comunicado remitido a los trabajadores.
Esta compañía ha decidido, por tanto, no acogerse a la prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo hasta el 31 de enero de 2020, que pactó esta semana el Gobierno con los empresarios y los sindicatos.
Phone House abrió su primera tienda en España en 1997. Actualmente cuenta con una red compuesta por más de 500 tiendas en el país gestionadas por 2.300 trabajadores, según la información difundida a sus franquiciados.
El grupo vasco Dominion adquirió The Phone House en septiembre de 2017 al grupo británico Dixons Carphone por 55 millones de euros. El cierre de tiendas durante el confinamiento supuso un duro golpe para la matriz, que vio cómo su beneficio se hundía un 43% durante los tres primeros meses del año.
No es la primera vez que esta empresa de tiendas de telefonía atraviesa dificultades económicas, ya que en 2019 echó la persiana a medio centenar de tiendas.
Este medio se ha puesto en contacto con el grupo Dominion para ampliar esta información, pero no ha querido responder.