Peces de plástico
(Por Pablo Burgués)
El otro día, viendo ese programa de humor y ciencia ficción llamado Informativos Telecinco, me enteré de que según los expertos en 2050 habrá en el mar más plásticos que peces. Estos mismos señores también afirman que a día de hoy la cantidad de residuos plásticos en nuestros océanos es de 150.000.000 de toneladas.
No sé a ti, pero a mí cuando me hablan de cantidades de más de tres ceros el cerebro se me cortocircuita, así que por mucho que lo intentaba no era capaz de imaginar cuanto plástico era aquel.
Como soy una persona inquieta y ávida de conocimiento (lo que en mi pueblo se conoce como un tío con mucho tiempo libre), tras ver aquella noticia abandoné mi amado sofá y me lancé a las calles de Ibiza en busca de respuestas. Para encontrarlas llevé a cabo un riguroso experimento: compré una botella de agua de litro y medio, me la bebí y una vez vacía la puse sobre una báscula de precisión que tiene un amigo mío para cosas suyas que ahora ni vienen al caso... El peso exacto de aquel envase eran 45 gramos, cantidad entre la que dividí los 150 millones de toneladas de basura y voilá: 3.333.333.333.333,33 (o lo que es lo mismo, que ahora mismito hay más de tres fucking BILLONES de botellas de plástico de 1.5 litros flotando por los mares del mundo.
Si nos centramos en el Mediterráneo la cosa no pinta mucho mejor, ya que se calcula que el 72% de toooooda la basura anual recogida en tooooodas sus playas es plástico. Esto, además de estar muy feo, está provocando que cada vez más ejemplares de especies como la tortuga boba estén muriendo por la ingesta de este material. Y tú dirás: "Al bicho ese no le podían haber puesto un nombre mejor, porque la verdad que hay que ser muy boba para comerse eso". Pues bien, que sepas que tú y yo, homo sapiens sapiens con estudios y un máster de la Universidad Rey Juan Carlos, también nos estamos poniendo finos a plástico every day...
Y es que cuando hablamos de que una tortuga o un pescado "comen" plástico, no nos referimos a que estos animales se metan un bocata de media barra de botes de detergente entre pecho y espalda, sino que se trata de la ingesta involuntaria de cientos de minúsculos trozos de plástico en semi-descomposición que se encuentran flotando por el mar. Estos desechos se van acumulando día a día en sus cuerpecitos y cuando nosotros nos los comemos, toda esa basura va a parar a nuestras panzas.
¿Qué por qué te cuento todo este rollo? Pues porque Greenpeace quiere dar el toque a la ministra de Medio Ambiente para que ella y sus colegotes europeos hagan algo para solucionar el grave problema de los plásticos en el Mediterráneo. Y yo he pensado que a lo mejor tú tienes por ahí una firma que no uses mucho... Y que tal vez se la puedas prestar a estos chavales... Y que lo mismo todas juntas sirven para algo... Y eso, que aquí te dejo el enlace a su web por si tú también te has levantado hoy con el pie optimista.