Allí se ha encontrado con Paolo Vasile, consejero delegado de Mediaset España, y la reina ha roto mínimamente el protocolo para hacerle un saludo un poco más especial que al resto. Él ha correspondido también girando la cabeza, en un gesto de complicidad especial.
En las últimas visitas de máximo nivel de mandatarios extranjeros, los invitados se habían repartido en mesas redondas con pocos comensales para respetar las medidas sanitarias.
La mejoría de la situación sanitaria ha permitido recuperar la pomposidad del convite, aunque los 90 asistentes que han participado en él han guardado algo más de distancia entre ellos que la habitual.
La de Mattarella es la primera visita de Estado a España de un presidente italiano en los últimos 25 años, cuando la protagonizó Oscar Luigi Scalfaro.
De primera dama, ha ejercido su hija, Laura, quien le suele acompañar a los viajes al extranjero desde que enviudó en 2012.
Los reyes, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y otras autoridades han portado la banda verde de la Orden del Mérito de la República de Italia.
Doña Letizia ha lucido además la tiara rusa, una de las más preciadas de su joyero.