La OTAN acordará en Madrid duplicar las tropas en los países del Este frente a la amenaza rusa
Aumentará a más de 300.000 sus fuerzas de alta disponibilidad, según ha anunciado el secretario general.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha anunciado este lunes que la Alianza acordará en la cumbre que se celebrará el miércoles y el jueves en Madrid duplicar las tropas en los países del Este frente a la amenaza rusa.
El cambio supone, como mínimo, duplicar el número de tropas disponibles frente a la amenaza de Rusia, de unos 1.200 a 3.500 cada uno, hasta 28.000 en total. La idea es reforzar algunos de los batallones desplegados en países del este de Europa a nivel de brigadas. “Nuestra cumbre esta semana en Madrid va a ser transformadora, e incluirá muchas decisiones importantes, incluyendo el nuevo concepto estratégico para una nueva realidad”, ha dicho Stoltenberg, que también añade que se reforzará la ayuda a Ucrania para ahora y para el futuro.
Los líderes de la OTAN esperan acordar en la cumbre que celebrarán en Madrid el miércoles y el jueves un incremento de sus fuerzas de alta disponibilidad a “más de 300.000”, informó también el secretario general.
“Los aliados considerarán a Rusia como la mayor y más significativa amenaza a nuestra seguridad”, ha explicado. Stoltenberg ha dicho también que se reunirá mañana con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y los líderes de Finlandia y de Suecia para abordar la candidatura de los países nórdicos a entrar en la OTAN.
Mientras, el G-7, el grupo de los siete países más industrializados del mundo, cuyos líderes están reunidos desde ayer en Elmau, en el sur de Alemania, ultima este lunes un nuevo paquete de sanciones contra Rusia por la guerra en Ucrania, según ha anunciado una fuente oficial estadounidense a la agencia de noticias Reuters. El acuerdo, según el funcionario americano, pondrá un precio límite a las exportaciones de petróleo ruso.
Los líderes del G-7 también firmarán “un compromiso a largo plazo para entregar a Ucrania apoyo financiero, humanitario, militar y diplomático durante el tiempo que sea necesario”, según ha anunciado la Casa Blanca. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha pedido a los líderes mundiales más armas, nuevas sanciones contra Moscú y ayuda para desbloquear las exportaciones de cereales en una intervención por videoconferencia.
En el terreno, el jefe de la administración militar de Lugansk, Serguéi Gaidai, ha pedido a los residentes de Lisichansk, en el este, que abandonen la ciudad, último reducto de la resistencia ucrania en la provincia y escenario de feroces combates tras la toma de la vecina Severodonetsk.
Ojo con Suwalki
El secretario general de la OTAN tambiñen ha asegurado en su intervención que Putin, “conoce las consecuencias de atacar a un país aliado” ante las tensiones entre Lituania y Rusia por los controles que Vilna aplica a los bienes que entran y salen del enclave ruso de Kaliningrado, que afectan al llamado corredor Suwalki.
La medida, que Lituania defiende como una aplicación de las sanciones de la Unión Europea a Moscú, fue calificada de “ilegal y sin precedentes” por el Kremlin, que ha amenazado al país báltico con represalias.
“Estoy seguro de que Moscú, el presidente Putin, entiende nuestras garantías de seguridad colectiva y entiende las consecuencias de atacar a un país aliado. Activaría la respuesta de toda la Alianza”, apuntó Stoltenberg. Mostró igualmente su preocupación por el incremento en la presencia militar rusa en Kaliningrado, que “lleva varios años teniendo lugar con sistemas de armas avanzados”, y apuntó a que es parte de la razón por la que la Alianza ha modernizado sus fuerzas y capacidades e incrementado su presencia en esa región.
“Lo que estamos viendo ahora es que Lituania está implementando las sanciones económicas acordadas por la Unión Europea, y los aliados de la OTAN acogen favorablemente las sanciones europeas”, dijo Stoltenberg, que consideró las medidas restrictivas contra Moscú como “importantes porque aseguran que Putin paga un precio” por su ataque a Ucrania.
El incremento de la presencia de la Alianza en la zona pretende “enviar el mensaje de que se defenderá” a estos países y, con dicha señal, “se previene un ataque”, añadió.