La ola se acaba pero el calor persiste
Se mantiene el aviso en doce provincias.
La primera ola de calor del verano ha llegado este domingo a su fin tras cinco días sofocantes que han causado dos muertos y récords de temperaturas en muchas provincias, pero el calor persistirá en el arranque de la semana y mantendrá bajo aviso durante el lunes a doce provincias.
Los termómetros han descendido este domingo y seguirán esa tendencia este lunes, jornada en la que los únicos puntos que seguirán con temperaturas cercanas a los 40 grados -y por ello bajo aviso de nivel medio, naranja- son el Pirineo y la depresión central de Lleida, en Cataluña; y el sur de Huesca, la zona occidental de Zaragoza y el noroeste de Teruel, en Aragón.
Será un inicio de semana cálido pero alejado de la situación de bochorno generalizado reinante desde el pasado miércoles, cuando comenzó un episodio extremo que deja dos personas fallecidas por golpes de calor -un joven de 17 años en Córdoba y un hombre de 93 años en Valladolid- y varios casos de hospitalizaciones, en algunos casos de gravedad, en Murcia, Córdoba y Navarra.
La burbuja de aire cálido instalada sobre Europa occidental ha provocado que el aire se reseque y caliente, y ha causado además decenas de récords de temperaturas máximas para un mes de junio en casi una treintena de estaciones de medición de casi una decena de comunidades.
Más de veinte observatorios registraron temperaturas máximas históricas para junio. En Cataluña ocurrió en Barcelona Aeropuerto (35), Girona Aeropuerto (40,1), Lleida (43,4) y Tortosa (42,4), mientras que en Castilla y León se superaron los topes históricos absolutos en Soria (37,9), Burgos (38,3), Valladolid (38,8), Ávila (36,9), Segovia (38,1 y 25,9).
En Castilla-La Mancha rebasaron todos sus hitos en Molina de Aragón (37,8), Ciudad Real (40,8) y Cuenca (39,2); en Madrid, en Madrid Aeropuerto (41,1) y Madrid Retiro (40 y 24,2); y en Aragón, en Teruel (38,8), Calamocha (39,5), Daroca (40,7), Zaragoza Aeropuerto (43,2) y Huesca Aeropuerto (41,2 y 24,9).
En la Comunidad Valenciana ocurrió en Castellón-Almassora (38,8), en La Rioja en Logroño Aeropuerto (42,2) y en Navarra en Pamplona Aeropuerto (41,3).
El ambiente reseco, acompañado de polvo en suspensión que llegó a Europa con una masa de aire tropical africano, ha facilitado la propagación de incendios forestales, que han dejado hasta el momento más de 10.000 hectáreas calcinadas en grandes incendios en las provincias de Tarragona, Ávila, Toledo y Madrid, además de muchos otros de menor entidad sin contabilizar.
España no ha sido un caso excepcional en esta ola de calor. En el resto de Europa, tras el registro de temperaturas de hasta 45,9 grados que han batido el récord de 2003, las autoridades declararon la alerta roja por primera vez en algunas zonas de sus países.