La mirada se dirige al Ebro tras una jornada de graves inundaciones
La Confederación Hidrográfica del Ebro advierte de la crecida alcanzará las localidades de Logroño y Mendavia.
Las intensas lluvias, que han ocasionado la muerte de una mujer en Sunbilla e importantes inundaciones en Navarra, tenderán a remitir a lo largo del fin de semana con la mirada en la crecida del río Ebro y en el curso bajo del Arga, con previsión de desbordamientos en Peralta, Falces y Funes.
Y es que, según las previsiones de la Confederación Hidrográfica del Ebro, la crecida será extraordinaria en el tramo medio del Ebro, análoga a la de 2015, el máximo registrado desde 1997, y puede alcanzar en Castejón y Tudela de 2.500 a 3.200 m3/s.
Durante la madrugada y primeras horas de la mañana de este sábado, según apunta, la crecida del Alto Ebro alcanzará las localidades de Logroño y Mendavia (1.400-1.600 m³/s).
Una vez que el pico de la crecida del Arga ha sobrepasado Pamplona y las localidades de la cuenca, causando importantes inundaciones y daños en zonas urbanas, la preocupación se centra ahora en el curso bajo del río, concretamente en los términos de Peralta, Falces y Funes, donde se prevén desbordamientos.
Así se ha puesto de manifiesto en la reunión que ha mantenido esta tarde el Comité Asesor de Emergencias, en la que han participado miembros del Gobierno y de ayuntamientos.
Bomberos del Grupo de Rescate Acuático vigilan la mota de Falces, que en el caso de no resistir la crecida del Arga inundaría tierras de labor aproximándose al casco urbano.
La punta de la avenida se espera que llegue a Peralta sobre las 22 horas, a las 24 alcanzaría Falces y aproximadamente una hora más tarde sobrepasaría Funes. En estos momentos ya se han producido cortes en las carreteras de la zona por desbordamientos.
En cuanto al Ega, el máximo de la riada ha sobrepasado Estella causando menores afecciones de las anunciadas por los modelos predictivos.
El Ebro también registra ya un considerable aumento de nivel y caudal, y se espera que el pico de su avenida llegue a Castejón sobre las 22 horas del sábado con un caudal de 2.900 metros cúbicos por segundo y Tudela en torno a la 1,30 de la madrugada del domingo con un caudal de 2.880 m3/s.
Los daños en Navarra
Pamplona y Comarca han registrado importantes daños, especialmente los barrios pamploneses de Rochapea, San Jorge y Txantrea, y las localidades de Huarte, Villava y Burlada.
Algunas localidades han quedado puntualmente aisladas, y también se han registrado cortes de suministro eléctrico en las localidades y barrios directamente afectados por las inundaciones.
Las inundaciones han afectado a dos carreteras de la red principal, la N-121-A a la altura de los túneles de Belate y Almandoz; y la N-135, en el Puerto de Erro. Asimismo, una treintena de carreteras secundarias presentan incidencias por inundaciones, desprendimientos y nieve.
Esta ha sido una de las numerosas intervenciones en una jornada en la que los vecinos de diversas zonas han tenido que ser auxiliados al ver como se inundaban sus casas y una veintena de residentes de El Vergel han sido evacuados del centro, en el que la inundación ha afectado al sótano, lo cual ha provocado la caída del cuadro eléctrico y, por tanto, la imposibilidad de utilizar la calefacción y el teléfono.
Un total de 2.600 hogares se han visto afectados por el suministro eléctrico de Iberdrola durante las riadas, la mayor parte de ellas en el barrio pamplonés de la Rochapea.