La Fiscalía pide absolver a Errejón porque no hay prueba de agresión a un ciudadano
Defiende que hay “versiones contradictorias” y que “no hay ninguna prueba".
La Fiscalía ha pedido la absolución del líder de Más País, Iñigo Errejón, porque no hay ninguna prueba que acredite que propinó un patada a un hombre que le pidió una foto en 2021, al término del juicio en el que el diputado ha negado que agrediese a ese ciudadano, una versión que han corroborado tres testigos.
Por su parte, el ciudadano que denunció la agresión, Alberto Domarco, de 67 años, ha sostenido que Errejón le dio la patada sorpresivamente cuando le dijo que le iba a criticar en redes sociales, lo que ha sido secundado por el amigo que le acompañaba aquel 2 de mayo de 2021.
Iñigo Errejón se ha sentado en el banquillo del Juzgado de Instrucción número 16 de Plaza de Castilla acusado de un presunto delito leve de maltrato por esa denuncia. Le ha juzgado el titular de otro órgano -el del Juzgado de Instrucción 43- que es el juez “espejo” o sustituto natural de Margarita Valcarce, que planteó abstenerse al haber llevado ella la investigación del caso.
El fiscal ha pedido la absolución del dirigente de Más País al considerar que hay “versiones contradictorias” y “no hay ninguna prueba por la que quede acreditado que Iñigo Errejón dio una patada”.
En la misma línea se ha pronunciado el abogado del político, que ha dudado de la versión del testigo del denunciante y puesto de relieve “la nula relevancia penal” de este caso.
Por su parte, el abogado del denunciante ha pedido que se imponga al diputado la mayor condena posible por un delito leve de maltrato, que son dos meses de multa, por una cantidad de cien euros al día -6.000 en total- y una indemnización de 1.500 euros para su cliente.
La versión del denunciante ha sido corroborada por el amigo que le acompañaba aquella noche, quien ha asegurado que Errejón dio una patada “frontal” y de estilo “karateka” a Alberto, cuando el denunciante solo le había pedido una foto de forma “elegante”.
Los diputados de Más Madrid Héctor Tejero y Alberto Oliver y el asesor Carlos Martín han refrendado la versión de su compañero de partido.
Oliver ha detallado que él estaba más lejos que los otros dos compañeros y vio cómo un hombre de raza negra, que había estado molestando a su grupo, iba hacia un hombre que había tenido unas palabras con Errejón, y se ponía violento con él, llegado a golpearle, por lo que él intervino y se puso en medio.
El caso
Errejón ha planteado en el juicio que el denunciante le pidió una foto insistentemente aquella noche, “de forma burlona y despectiva”, cuando venía de cerrar la campaña electoral de las elecciones madrileñas y él ya se iba a casa por el toque de queda que había impuesto por la pandemia.
Previamente un hombre de raza negra había molestado a su grupo y por eso él se había apartado un poco, mientras esperaba que otros compañeros comprasen en una tienda de comestibles
Cuando el hombre que le pedía la foto se le acercó, haciendo amago de agarrarle por el cuello para hacerse la foto, le retiró el brazo, sin darle ninguna patada ni insultarlo.
El hombre le dijo frases como “venga rojillo sácate una foto conmigo”, “te pongo verde en redes sociales” y “cabrón, hijo de puta, te voy a joder la vida, te vas a cagar”, según Errejón.
Ha reconocido que un amigo le dijo que mejor se fueran y él estaba enfadado porque le parecía mal que tuviera que irse oyendo insultos, por lo que llegó a decir al denunciante: “Ven tú”.
Errejón ha puesto de relieve que es habitual que le pidan fotos, que suele hacerse, y que cuando se niega los interesados lo entienden.
Por el contrario, Alberto Domarco ha sostenido que le dijo al político, que estaba con más personas: ”¿Me puedo hacer una foto contigo?” y Errejón se rio y le contestó: “a esta hora no trabajo”, por lo que él le insistió, diciéndole que tenía una foto con Juan Carlos Monedero, y añadiendo: “Aunque te pongo a parir en redes sociales”.
Entonces, según su relato, Errejón le dio una patada “con desprecio y violenta” y él notó un dolor en la zona en la que tenía una hernia, relacionada con un cáncer, por lo que llamó a la Policía.
Reconoce que tras la patada sí le insultó, pero antes solo se dirigió al político “en plan risas, sarcástico”, aclarando que él no siente animadversión hacia Errejón, aunque en redes sociales sí ha hecho comentarios negativos sobre él y otros dirigentes de izquierdas como Pablo Iglesias. Ha detallado es del PP, y no de ultraderecha.