La consejera de Sanidad de Aragón dimite tras sus polémicas declaraciones
Aseguró que era un estímulo para los médicos que se tuvieran que hacer sus propios equipos de protección.
La consejera de Sanidad de Aragón, Pilar Ventura, ha presentado este martes su dimisión arropada por el presidente de Aragón, Javier Lambán, en una comparecencia sin preguntas en la que ha asegurado que no puede continuar cuando sindicatos y profesionales sanitarios no la aceptan y que deja el cargo con el ánimo de no ser “un estorbo” para la superación de la crisis de la Covid-19.
Ventura ha sido cuestionada duramente durante los últimos días por los colectivos sanitarios y por la oposición por decir, en una comparecencia ante la Comisión de Sanidad de las Cortes de Aragón, el pasado viernes, que era un “estímulo” para los médicos que se tuvieran que hacer sus propios equipos de protección.
Javier Lambán ha informado de que hasta el miércoles o jueves no se conocerá al sustituto.
En la declaración ante los medios, de forma telemática, la consejera ha insistido en que con sus palabras en sede parlamentaria no tuvo intención de ofender y, al igual que lo hizo al día siguiente de su intervención, este martes ha vuelto a lamentar sus “equivocadas palabras” y a pedir perdón por no haber podido dotar a los profesionales en su momento del suministro de equipos de protección necesarios.
“Hemos hecho todo lo que se ha podido y trabajado con absoluta dedicación y empeño para evitar el colapso del sistema sanitario y contener la transmisión de la enfermedad”, una labor que, ha dicho Ventura, se ha hecho también con el esfuerzo de los profesionales sanitarios y “con el sacrificio de la sociedad aragonesa, cumpliendo las medidas confinamiento con gran responsabilidad”.
Una gestión que, ha reconocido, ha permitido que todo Aragón haya podido entrar en la fase I, en la que se ha relajado el confinamiento y que va a permitir que el sector empresarial y productivo “pueda tener alguna posibilidad de recuperación”.
“Aragón ha sacado sus fortalezas y hay un futuro esperanzador, pero no puedo estar al frente cuando sindicatos y profesionales no me aceptan. No quiero ser un estorbo para esta recuperación”, ha sentenciado Ventura, quien ha dicho que en su decisión de dimitir ha pesado, por encima del cargo, la salud de los aragoneses y dar a la sociedad la posibilidad de una recuperación social y económica.
En su turno, el presidente de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado que él “jamás” hubiera tomado la decisión de cesar a la consejera porque “su trabajo ha sido impecable desde el día que tomó posesión”.
Una dimisión que para Lambán “acrecienta” la categoría de Ventura “como persona, mujer, como responsable política, su altura moral y ética” y que le reafirma en el acierto de su nombramiento como consejera de Sanidad.
Lambán ha agradecido esta decisión “de todo corazón” y ha expresado sus dudas de que al frente de la Consejería “pueda haber nunca una persona de la altura moral, compromiso y de dedicación al cargo que ha tenido Pilar Ventura”.
“Nadie ha sufrido más por la ausencia de materiales de protección ni ha trabajado más por pertrechar al sistema de salud de esos materiales de protección ni se ha dejado la piel por encarrilar esta crisis que Pilar Ventura”, ha insistido el presidente aragonés quien ha abogado por tener una relación cordial con sindicatos sanitarios y colegios profesionales para tener un sistema sanitario eficiente porque “quedan muchas etapas por superar”.
Ventura (Zaragoza, 1958) es funcionaria del Grupo A del cuerpo de Administradores Superiores de la Administración de la Comunidad Autónoma de Aragón.
Tomó posesión de su cargo como consejera de Sanidad el 18 de julio de 2018, tras la también dimisión de su predecesor, Sebastián Celaya, a tan solo diez meses de concluir la pasada legislatura.
Y lo revalidó tras las últimas elecciones autonómicas y locales, cuando Lambán volvió a contar con ella para que se ocupara de esta cartera en agosto de 2019.
Licenciada en Derecho por la Universidad de Zaragoza, ejerció la abogacía desde 1980 a 1990 y desde entonces ha sido secretaria General del Servicio Aragonés de Salud, directora general de Gestión de Personal en el Departamento de Educación, directora General de la Función Pública del Departamento de Presidencia, consejera de Ciencia, Tecnología y Universidad entre 2008 y 2010 (en el ejecutivo del socialista Marcelino Iglesias), directora general de Cooperación Autonómica del Ministerio de Política Territorial y Administración Pública y secretaria General Técnica del Departamento de Sanidad entre 2015 y 2018.