Jorge Vilda estalla: "Esto es un ridículo a nivel mundial"
El seleccionador explica, tras dar su primera lista sin 'las 15', que "nunca" pensó en dimitir y pide "respeto" para él y para las convocadas.
Jorge Vilda ha dado la cara nada más dar su primera lista tras el ‘plante’ de las 15 jugadoras que pidieron no ir convocadas si él seguía. Muy dolido, el seleccionador ha reconocido que “no deseo a nadie lo que estoy viviendo estos días”, antes de arrancar una rueda de prensa a cara de perro en la que ha calificado la situación como “un ridículo a nivel mundial” y ha lanzado una advertencia ante los “rumores vertidos”.
“Por la falta de claridad en el mensaje de las jugadoras se han deslizado dudas de que haya algo extradeportivo y es normal, porque todo lo que se ha montado no tiene sentido si es solo deportivo. Si hay algo que no haya sido un trato exquisito a mis jugadoras, desde aquí reto a que cualquiera salga y diga que no ha habido respeto o pongaalguna tacha a mi comportamiento en toda mi carrera”, ha espetado.
Vilda ha tomado la palabra apenas un par de minutos antes de dar paso a las numerosas preguntas de los medios acreditados, pero el mensaje inicial ha dado mucho de sí. “Pido a quienes mandaron el email que tengan el máximo respeto por las jugadoras que no están en su lista. Vestir la camiseta de España es a lo máximo que puede llegar una futbolista”, ha enunciado con gesto serio.
Varias veces ha exigido este respeto hasta que al final de su intervención ha señalado que pide “respeto para todo el mundo, pero especialmente para quienes han venido”,
Como ya hiciera en su anterior rueda de prensa, en la que se evidenció de forma pública la ruptura entre técnico y plantilla, ha negado cualquier opción de dimisión. “Nunca” ha pensado en irse, ni tras los enfrentamientos con la plana mayor del equipo, y ha vuelto a presumir del apoyo de la federación, así como de su gestión y sus métodos de trabajo... si bien insiste en haber hecho ‘autocrítica’ tras “varios” errores.
El técnico madrileño se ha detenido en la Eurocopa, donde España cayó en cuartos tras rozar el pase a semifinales contra la anfitriona y posterior campeona, Inglaterra, un torneo en el que “no hemos sido peores que nadie y hemos perdido con la campeona y subcampeona”. Sí ha admitido fallos “puntuales” durante el campeonato, no relacionados con su gestión sino “provocados por un estado mental que no era óptimo para competir al máximo nivel”.
Vilda ha defendido en todo momento no saber en qué se basan las quejas de las jugadoras —“que han lanzado la piedra y escondido la mano”— y ha llegado a decirles que “yo no he recibido información precisa de los cambios que necesitan. Que se expliquen, que se expresen”. Además, ha recordado que las jugadores “no han pedido mi dimisión, ni lo han pedido ni me lo han pedido; nadie me ha dicho ‘Jorge, da un paso al lado’”. Únicamente ha concedido admitir que han hablado “mucho”, pero sin querer dar “un poco de luz” al conflicto, como le han pedido desde la sala de prensa.
Respeto “para las que están y las que puedan venir”
Sin poder disimular su dolor, evidente hasta en su gesto, ha asegurado que su mayor pesar es “por el fútbol femenino español” y ha llegado a hablar de “un ridículo a nivel mundial” al ser preguntado por la relevancia internacional del anuncio de las 15 deportistas, que han recibido apoyos de otras de las mejores jugadoras del planeta, como las estadounidense Megan Rapinoe o Alex Morgan.
Mucho ha sido lo que ha dicho y mucho ha sido lo que ha callado, especialmente “de las que no están”. Por ello, el seleccionador tampoco ha querido explicar ninguna de las conversaciones privadas que ha mantenido con otras jugadoras, preguntado por el caso de Jenni Hermoso, que aseguró apoyar a sus compañeras pero no compartir las formas. A cambio, Vilda ha dejado caer que pide respeto “para las que están y las que puedan venir”.
Ante la presión del público, Vilda, que ya ha tenido que ver gritos en su contra en partidos de LaLiga F, se enfrenta ahora a la doble cita amistosa en Córdoba y Pamplona. Sin embargo, confía en el “buen ambiente” que se vivirá en las gradas y que “las jugadoras salgan con las ideas muy claras”.