"Hospitales 'fake' y caras de cemento armado", por Marta Flich
Un hospital de pandemias que no está vacío, está lleno de amor.
¡Qué gran obra el Hospital Isaben Zendal! ¡Bravo! ¿Quién puede no alegrarse de construir un hospital con el dinero de todos? Da igual que esté vacío, lo que está es lleno de amor.
Además, menos quejarse. ¡Ni que lo hubierais pagado vosotros! Ups... Bueno, y para los que dicen que igual con la vacuna no hacen falta más hospitales, acaso han pensado en las grandes oportunidades de estocaje que nos proporcionaría un gran espacio diáfano como el hospital. ¡Por eso no tiene habitaciones! Y además, si no enchufamos la calefacción, seguro que la vacuna se conserva mejor, ¡y eso que nos ahorramos! Que en Madrid en diciembre parece que no, pero refresca.