Haz que las comilonas de Navidad sean más saludables sin que se note
El punto fuerte de cualquier reunión familiar o de amigos suele ser la comida, y especialmente si estamos en época navideña. Los menús de estas fiestas están llenos de tentaciones, con altos contenidos de azúcar, sal y grasa saturada. Que si el pavo, los canelones, el cochinillo, los turrones y polvorones... por no decir del alcohol que se bebe durante estas fechas. Platos pesados y calóricos que nos hacen sentirnos hinchados y perder los buenos hábitos que hemos mantenido con tanto esfuerzo durante el resto del año.
Lo ideal sería dar un giro completo a nuestro menú y celebrarlo con platos más saludables donde las verduras sean las protagonistas. La cena ideal de Navidad estaría compuesta por una crema o sopa ligera, un plato principal con mucha verdura y como postre algo hecho a base de harinas integrales y sin azúcares.
Pero todos sabemos que esto muchas veces está muy lejos de la realidad y de la posibilidad. Muchos somos invitados a casas ajenas donde no se sigue lo que sería una dieta ideal y nos tenemos que enfrentar sí o sí a platos copiosos y tantísima comida como para alimentar a toda una ciudad. O puede que para ti, estas fechas navideñas signifiquen mucho más, te hagan vivir algo especial, recordar tiempos pasados y las esperes con gran ilusión durante todo el año y el pensar solo en no probar ni un bocado de turrón o ese plato tan rico que hace tu madre solo en estas fechas, te ocasione más estrés que el hecho de comértelo, si es así adelante, disfruta al 100%.
Y ahora os preguntaréis, ¿se podrían hacer algo para que estás comidas/cenas sean un pelín más saludables sin que se alteren los platos tradiconales? Pues claro, siempre se puede contribuir para que esos platos tan pesados lo sean un poquito menos.
Como todo buen invitado, aporta tu granito de arena a las comilonas con deliciosas cosas que son súper saludables pero que no lo parecen:
- Una botella de kombucha para brindar, con su perfecta acidez y sus burbujas finas y potentes esta bebida es el sustituto saludable del clásico cava o champagne.
- Unas chips de kale son ideales para picotear antes de la gran cena, hechas al horno te aportarán montones de nutrientes y disfrutarás de ese toque crujiente tan adictivo.
- Encurtidos, las verduras fermentadas son lo más de lo más, con bacterias probióticas que te ayudarán a digerir esa comida tan copiosa que estás apunto de comerte. Disfrútalas como aperitivo o como acompañamiento del plato principal
- Obsequia a tus anfitriones con una deliciosa ensalada donde el color predominante sea el verde, quedarás genial y estarás contribuyendo a que todos se beneficien de sus vitaminas y minerales ;)
- Trae tu el postre, algo elaborado con ingredientes ricos en enzimas digestivas como la piña o la papaya. Se me ocurre un 'tiramisú' de piña, una piña caramelizada o simplemente una bandeja enorme de fruta variada, queda super vistosa y muy colorida.
Sea como fuere, lo importante es que seas 100% consciente, que cuando comas disfrutes de cada momento, de cada bocado, sin distracciones ni prisas.