"Hablamos de niños": La importante reflexión de Morad en 'Lo de Évole'

El programa Lo de Évole ha arrancado este domingo con el rapero Morad —que fue escogido por los espectadores en una votación popular— como primer invitado en el estreno de la tercera temporada del formato que conduce Jordi Évole.

En un momento de la entrevista, el periodista le ha preguntado por la palabra “mena”, y ha señalado “que ahora se dice en los medios de comunicación, o a veces en el Congreso”.

“Me da mucha pena, ya he cogido pena a ese tema”, ha respondido sincero el cantante. “He cogido mucha pena, mucha tristeza, mucho malestar, porque he pensado que las personas ya no tienen corazón”, ha continuado.

Así, el rapero, que ha dado una entrevista en la que ha mostrado su orgullo por su barrio de L’Hospitalet de Llobregat y sus raíces marroquíes, ha reflexionado: “Si tú a una persona le estás llamando por un nombre, que no sabes ni de dónde lo has sacado, ¿mena?. O sea, ¿ese es el Morad, ese es Jordi, ese es Alberto y ese es mena?. Pero si tiene nombre, ¿pero esto qué es? ¿Qué estamos en la época de los nazis cuando cogían a los judíos? ¿Estos son los judíos y nosotros somos los nazis?”.

Además, el artista ha explicado “para qué” se emplea esta palabra. “Para tapar toda la realidad. Vamos a hablar de los menas, la gente se pone a hablar de ellos, echamos las culpas a otro y tapamos toda la realidad que estamos viviendo en la calle: que es que tú no tienes comida, yo no tengo comida, pero los dos nos reímos de un mena por la tele. Eso no está bien”, ha sentenciado.

“Las personas son buenas o malas. No hay ninguna raza que sea mala. ¿Cómo tú tachas que si eres mena eres malo?”, ha preguntado al aire mientras ha admitido qué es lo que más le duele a él: “las violaciones”.

“Usan a un mena como que él ha violado, todo el castigo del mundo. Vamos a rajatabla. Pero dime la verdad, en España quiénes más violan son los españoles, los que más pegan a sus mujeres son los españoles. ¿Por qué eso no lo dices?”, ha planteado.

Morad, así, ha destacado que todo esto se produce mientras se está hablando de niños. “Sabemos que todo hay que tenerlo en regla y hay que entrar a las personas con un cierto control. Eso es súper entendible, por el simple hecho de si pasan cosas tener un control de todo. Pero cuando ya hablamos de niños, cuando ya hablamos de niños, tú no puedes hablar ni de control ni de nada. Estás hablando de un niño. Un niño”, ha recordado.