La CUP aprieta a ERC en las cuentas: referéndum, subir IRPF y decir no a JJOO y Hard Rock
La formación asegura que no retirará la enmienda a la totalidad si no se producen "cambios sustanciales".
No es un problema de partidas presupuestarias. Se trata de “romper con la deriva del Govern”. Así han definido desde la Candidatura d’Unitat Popular (CUP) las claves de la enmienda a la totalidad que han registrado este miércoles ante el proyecto presupuestario del Ejecutivo catalán. El objetivo es el de lograr un giro a la izquierda y fijar el horizonte de un referéndum de independencia.
La CUP ha presentado un documento de trabajo al Govern en el marco de las negociaciones de los Presupuestos de 2022 en el que exigen la retirada de las cuentas de proyectos como el Hard Rock y el Circuit de Cataluña, que no presenten candidatura Juegos Olímpicos de Invierno, así como crear nuevos tramos de IRPF.
Los anticapitalistas han asegurado que la decisión la tomarán en función si hay “cambios sustanciales” y no si se cumplen dos o tres de las medidas que proponen, sino como una valoración global de la actitud del Govern. También han concretado que no entrarán a regatear en la negociación.
Aún no han decidido si volverán a convocar a la militancia para que se pronuncie sobre si ha habido o no ese cambio sustancial, pero han subrayado que esta decisión no la tomará el grupo parlamentario y que la Coordinadora Oberta Parlamentària (COP) hará un primer análisis y valoración.
En materia de vivienda
Los ‘cupaires’ reclaman llegar a los 1.000 millones de euros para vivienda, para lo que el Govern ha presupuestado 750, y han concretado que quieren que estos 250 que faltan deben invertirse en parque público, porque consideran que han aumentado las partidas pero se siguen destinando a “transferencias a promotores privados”.
En vivienda, también han pedido la retirada de las enmiendas de Junts a la ILP para readaptar el decreto ley sobre vivienda que tumbó el Tribunal Constitucional, porque creen que “desvirtúan el texto” y han añadido que este era un compromiso al que llegaron para la investidura.
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se ha abierto este miércoles a aceptar la propuesta de los comunes de negociar con ellos el proyecto de Presupuestos de la Generalitat 2022, que hasta ahora solo abordaba con la CUP, pero ha rechazado la misma propuesta del PSC.
Durante la sesión de control al presidente de la Generalitat en el pleno del Parlament, la líder de los comunes en la Cámara, Jéssica Albiach, le ha insistido en su oferta y le ha advertido de que nadie entendería que buscara sacar adelante las cuentas “por la mínima” cuando hay fuerzas políticas más allá de las independentistas dispuestas a negociarlas.
El presidente del PSC en el Parlament y líder de la oposición en Cataluña, Salvador Illa, ha pedido formalmente una reunión a Aragonès “para estudiar y explorar la posibilidad de unos Presupuestos de país, para todos, para que juntos podamos hacer frente a los retos que tiene Cataluña”.
Illa ha defendido que “hacen falta unos Presupuestos de país, no de bloques”, y que sean para toda Cataluña y no solo para los independentistas, y ha llamado a la responsabilidad política ante las cuentas. Aragonès le ha contestado en la Cámara catalana: “Usted y yo no compartimos modelo de país”. El president le ha asegurado que su compromiso como presidente es el programa con el que fue investido y que, a su juicio, las cuentas incorporan ese mismo rumbo.
El líder socialista ha planteado a Aragonès celebrar la reunión después de la sesión de control: “Creo que razonar con el otro no es malo. Usted ha abanderado muchas veces el diálogo, tenemos la ocasión de practicarlo”. La respuesta del líder del Ejecutivo catalán ha anticipado que no aceptará ningún acuerdo con los socialistas. “Nos podemos reunir pero ya puede aventurar mi propuesta”, ha dejado entrever.