Del runrún a la fiesta: España golea 0-5 a Eslovaquia y pasa a octavos como segunda de grupo
Y todo empezó con Morata fallando un penalti...
¿De verdad hacía falta llegar a esto? España se ha clasificado para octavos después de golear a Eslovaquia y pasa como segunda de grupo. La noticia, en otro momento, no hubiera sido tan llamativa, pero tal y como llegaba la selección al último partido su relevancia se agiganta. 0-5, fiesta de juego y goles y pase a octavos por la puerta grande: misión cumplida.
Solo sobró un tanto, el de Claesson en el descuento que supuso la victoria de Suecia y que ‘condena’ a España a jugar contra la Croacia de Modric.
Para entonces las dudas ya estaban resueltas, pero a las 18:00 aún podía pasar de todo. Esta vez, la idea de juego parecía clara. Los de Luis Enrique, que revolucionó el once inicial buscando algo más de lo poco visto ante Suecia y Polonia, salieron a comerse a Eslovaquia. La tarea se vio que no iba a ser difícil ante el nivel del rival, pero sí requirió tiempo y algún disgusto.
El mal rato lo vivió el ya de por sí cuestionado Morata, tras fallar en el minuto 11 un penalti cometido sobre Koke. Del runrún en la grada se pasó a los pitos. Ni siquiera hubo guasa sevillana. Pitos. Pero por juego y por entrega, España merecía más. Se sucedieron las ocasiones: Sarabia, Gerard Moreno, otra de Morata, Pedri... Y con Busquets, amo y señor del mediocampo en su vuelta tras el positivo por coronavirus.
Por fin el gol
Tanto buscarlo España por sus propios medios y el gol tuvo que llegar gracias al meta eslovaco Dubravka, que anotó en propia puerta al no poder (¿saber?) despejar un balón que había dado en el larguero tras un remate potente de Sarabia.
Fue entonces, con el 0-1 y pasada la media hora, cuando Eslovaquia saltó al campo de La Cartuja, pero su ímpetu le duró poco. España quería más. Adelantó líneas para presionar al cuadro balcánico en su campo, de donde salir le costaba media vida. Así, al borde del descanso llegó la sentencia, con un cabezazo de Laporte que puso el 0-2.
En la segunda parte los de Luis Enrique parecieron bajar el pistón unos minutos. Lo aprovechó Eslovaquia en la medida de sus posibilidades, con dos balones filtrados entre los centrales españoles que causaron algún ‘sustito’ (no más) resuelto sin problemas por Unai Simón. Porque también jugó el meta vitoriano, aunque se le vio muy poco.
El mejor modo de evitar problemas
Podía ser un síntoma de cierto despertar eslovaco, así que España lo resolvió por la vía rápida. Una gran jugada combinativa de ‘La Roja’ (hoy de blanco) acabó con un toque certero de Sarabia para hacer el 0-3 en el 55’. Premio al gran partido del centrocampista del PSG.
Lo que quedaba por delante, más de media hora, fue de disfrute en las gradas y en el césped. Ferrán Torres en el 66′ (segundos después de sustituir a un Morata que se marchó con mayoría de aplausos) y Kucka, también en propia puerta, en el 70′ redondearon una goleada en un partido casi perfecto ante un rival muy, muy inferior. Lo que se preveía como normal y que hasta España llegó a poner en duda.
“Falló” Suecia, que hizo inútil el doblete del polaco Lewandowski, pero estamos en octavos, que ya es bastante, visto lo visto.