Etiqueta y condecoraciones
Las cenas de gala con motivo de una visita de Estado son una de las poquísimas ocasiones que hay aún para lucir las condecoraciones. Que no sean ya de uso diario no significa que no haya unas normas para ello. De los Reales Decretos de creación de las órdenes y condecoraciones podemos obtener alguna información: se especifica el tamaño de cada una de ellas y, si las tuviera, el color de sus bandas.
Así sabremos que se debe lucir el modelo reglamentado y no un diseño o interpretación personal de la condecoración; que no vale lucir medallitas inventadas, sólo las legales, o que si se ostentan condecoraciones extranjeras, no se lucen por delante de las españolas. Hay que saber que las órdenes preceden a las condecoraciones: en una orden se ingresa como miembro y una condecoración es un premio. Si se van a lucir, hay que prenderlas del centro del pecho hacia el brazo, siempre en el lado izquierdo y si se tienen varias, sólo la de categoría superior.
Pero, lo que no dicen los Reales Decretos, sin embargo, es cómo deben lucirse en las diferentes prendas, y tampoco si sobre cualquier solapa o vestido. Nos tenemos que guiar por los usos y costumbres. Y por supuesto, diferenciar entre hombres y mujeres, y entre las diferentes prendas.
Prendas masculinas
En el frac:
Grandes Cruces: en el lado izquierdo y hasta un máximo de cuatro
-una Gran Cruz: en el centro
-dos Grandes Cruces: una al lado de la otra
-tres o cuatro Grandes Cruces: en forma de rombo
Bandas: las Grandes Cruces llevan aparejada una banda, pero sólo se luce una por lo habrá que escoger entre las que se van a llevar, cuál de ellas se va a lucir. Se colocan cruzando el pecho de derecha a izquierda. Y teniendo en cuenta que:
-si en el acto está presente el rey: la banda se coloca por encima del chaleco
-si no está presente el rey: la banda va por debajo del chaleco.
Se ata en el costado izquierdo y del lazo cuelga también la miniatura de la Gran Cruz.
Collares: sólo se luce uno. Si se tienen varios, hay que elegir cuál es el adecuado al acto.
Encomiendas: como en el caso de los collares, sólo se luce una a elegir entre las que ostente la persona. Se llevan atadas al cuello.
Resto de condecoraciones: se llevan en miniatura en la solapa. Como se pueden llevar todas las que se quiera y se tengan, es posible que se necesiten dos filas:
-colgadas de un gran alfiler (o barrita)
-colgadas de una cadenita
El orden de colocación es: primero, Grandes Cruces, luego, las demás y las extranjeras las últimas.
En el chaqué:
Una sola condecoración en miniatura y en la solapa izquierda. A elegir entre las que se tengan.
En el esmoquin:
Básicamente, ninguna. Pero desde que el esmoquin lleva cuello con solapas –que es cosa de moda y diseño- se empieza a llevar alguna. En ese caso, una pequeña y en barrita.
En el traje:
En realidad, se puede llevar una condecoración en cualquier parte, incluso bordada en el jersey, pero por costumbre no se hace. Sólo se lucen sobre americana, una única, en la solapa izquierda, bien en barrita o bien en miniatura tipo pin.
Prendas femeninas
La ropa de la mujer no se lleva bien con las condecoraciones. Se suelen quejar de que afea el vestido, estropea la estética, no van con el diseño... aunque para ellas se han inventado versiones más pequeñas que se puedan añadir con cierta gracia al traje de fiesta.
Aun así, se deben cumplir unas normas:
-las órdenes se llevan con lazo de los colores de la orden del que cuelga la medalla o la cruz.
-la banda que corresponde a la condecoración o a la orden es más estrecha y se llama bandín. Se coloca del hombro derecho a la cadera izquierda.