Elon Musk pide perdón al buzo británico al que llamó pedófilo
El experto, que participó en el rescate de Tailandia, calificó el minisubmarino que Musk quería enviar como "un movimiento de marketing".
El director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, ha pedido perdón este miércoles al espeleólogo británico que participó en el rescate de 12 niños tailandeses y su entrenador de fútbol por haberle llamado pederasta.
Musk ha dicho a través de Twitter que había "hablado con rabia" cuando atacó a Vern Unsworth porque éste ridiculizó un mini-submarino que el empresario había encargado para las tareas de rescate en Tailandia.
"Sus acciones contra mí no justifican las mías y por eso le pido disculpas al señor Unsworth y a las compañías que represento como líder", ha dicho Musk en respuesta a otro usuario. "La culpa es mía y solo mía", ha añadido el empresario en la red social.
Unsworth ha dicho a la prensa este lunes que estaba considerando emprender acciones legales contra Musk.
Doce chicos y un entrenador fueron rescatados este mes del interior de una cueva en el norte de Tailandia tras permanece atrapados en la misma durante más de dos semanas.
El pasado día 6, Musk anunció que iba a mandar un equipo de ingenieros a Tailandia para ayudar en las tareas de rescate de los menores del equipo de fútbol juvenil atrapado en la cueva.
El buzo finlandés Mikko Paasi (izquierda) se dirige al rescate para salvar al equipo de fútbol atrapado en la cueva.
Los médicos militares de Tailandia participan en los preparativos del rescate.
Imagen compartida en Facebook por el perfil oficial de Thai Navy SEAL con un mensaje de ánimo. "Nosotros, Tailandia y los equipos internacionales unimos fuerzas para traer a los jóvenes a casa".
Los periodistas congregados en el exterior de la cueva abandonan el área para facilitar las tareas de rescate.
Un agente de policía tailandés vigila el área de bloqueo frente a tanques de oxígeno almacenados en un camión.
Los trabajadores del hospital tapan el lugar al que llegarán las ambulancias para proteger la intimidad de los niños.
La policía tailandesa espera la llegada de las ambulancias con los niños rescatados.
Una ambulancia abandona con las luces de emergencia encendidas y a gran velocidad el monte donde está la entrada de la gruta.
