El Gobierno da por hecho que los restos de Franco no irán a La Almudena
El Vaticano matiza a Calvo y dice que "en ningún momento" se pronunció sobre el lugar de la inhumación.
Una reunión, dos versiones matizadas, tensión el día después y la supuesta voluntad de llegar a un acuerdo sobre los restos de Franco. El Gobierno y el Vaticano han informado hoy sobre la reunión que mantuvieron ayer en Roma la vicepresidenta del Ejecutivo, Carmen Calvo, y el secretario de Estado de la Santa Sede, Pietro Parolin.
Durante la mañana, Calvo ha avanzado que el Gobierno y la Iglesia han acordado trabajar juntos para "encontrar una salida" a esta situación que, "obviamente" no puede pasar por que los restos del dictador acaben en la cripta de la catedral madrileña de La Almudena.
Horas más tarde, el Vaticano ha matizado que no se opone a la exhumación pero que "en ningún momento" se habló sobre el lugar de la inhumación. A lo que Calvo ha vuelto a responder en este 'culebrón': ayer acordó que el Gobierno y la Iglesia católica van a "trabajar conjuntamente para buscar una salida a que los restos de Franco no se inhumen en la catedral de la Almudena".
Este baile de versiones arrancaba por la mañana. En declaraciones a los medios de comunicación en los pasillos del Congreso de los Diputados, Calvo daba cuenta de la entrevista que mantuvo el lunes con el secretario de Estado del Vaticano y con el que trató varios asuntos que competen a la Iglesia y sobre los que el Gobierno quiere hacer cambios.
Respecto al destino de los restos de Franco una vez sea exhumado del Valle de los Caídos, Calvo anunciaba que la intención del Ejecutivo y la Iglesia es colaborar para intentar "encontrar una salida que, obviamente, no puede ser La Almudena".
Calvo ha recordado que el Estado tiene la obligación de vigilar que el dictador no sea enaltecido en ningún punto de España, por lo que sus restos deberán inhumarse "en un lugar en condiciones de dignidad, pero en ningún lugar en los que pueda ser objeto de ningún tipo de homenaje".
Hasta ahora el Ejecutivo había mantenido que si la voluntad de su familia era enterrarle en el nicho que tiene en la cripta de La Almudena, el Gobierno no se podía oponer pero, tras su cita con el secretario de Estado de El Vaticano, esta posición ha variado.
Usar la Ley de Memoria Histórica
Calvo ha destacado que la colaboración de la Iglesia en este tema está siendo "absoluta e incuestionable" y ha incidido en que el Gobierno tiene que aplicar la Ley de Memoria Histórica, que impide que el dictador acaba en un lugar donde pueda ser enaltecido.
Así se lo trasladó a Parolin quién, según ha explicado, "entendió que el Gobierno y la Iglesia" tienen "que intentar buscar una salida para que estén en un lugar en condiciones de dignidad, pero que no puedan ser objeto de ningún tipo de homenaje".
Calvo ha recalcado que la Catedral de la Almudena "no es de titularidad privada" sino "responsabilidad de la Iglesia" y que el Gobierno "tiene que garantizar que no se enaltece al dictador en ningún sitio del territorio nacional". "Estamos todos sometidos a las leyes", ha subrayado, remarcando que el Gobierno tendrá "instrumentos" para que se cumpla la ley.
Preguntada si descarta ya que Franco acabe en la cripta de la catedral, la vicepresidenta ha recordado que el propio arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ya dijo que "a ellos no les parece bien" que el dictador sea inhumado en ese templo y que ahora lo que se ha acordado es buscar una salida excluyendo la Almudena.
Las matizaciones del Vaticano: no se habló del lugar
Unas horas después de la declaración de Calvo, el portavoz del Vaticano, Greg Burke, ha precisado que durante la reunión entre el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, y la vicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo, Parolin "en ningún momento se pronunció sobre el lugar de la exhumación", aunque vio "oportuna" la solución de explorar otras alternativas al entierro en La Almudena a través del diálogo con la familia.
"A propósito de la reunión que mantuvieron ayer el Secretario de Estado de la Santa Sede y la Vicepresidenta del Gobierno de España quiero precisar lo siguiente: el cardenal Pietro Parolin no se opone a la exhumación de Francisco Franco, si así lo han decidido las autoridades competentes, pero en ningún momento se pronunció sobre el lugar de la inhumación", señala el comunicado publicado por la Santa Sede, este martes 30 de octubre.
Además, el Vaticano puntualiza que "es cierto que la señora Carmen Calvo expresó su preocupación por la posible sepultura en la catedral de la Almudena y su deseo de explorar otras alternativas, también a través del diálogo con la familia" y que al cardenal secretario de Estado "le pareció oportuna esta solución".
Calvo se ratifica
El comunicado del Vaticano ha provocado un gran revuelo político y periodístico. Calvo se ha pronunciado otra vez posteriormente y se ha reafirmado en que ayer acordó con el secretario de Estado vaticano que el Gobierno y la Iglesia católica van a "trabajar conjuntamente para buscar una salida a que los restos de Franco no se inhumen en la catedral de la Almudena".
El Gobierno considera que el comunicado del Vaticano no contradice el anuncio de Calvo y sostiene que su reconocimiento de que buscar una alternativa a la Almudena es algo "oportuno" lo avala, han dicho a Efe fuentes del Ejecutivo, que enmarcan la posición expresada en la nota dentro del lenguaje diplomático de la Santa Sede.
Sobre que el arzobispado de Madrid haya dicho que "no ha habido ningún contacto ni del Gobierno ni de la familia" con él para tratar este asunto, Calvo ha respondido que ella con quien ha hablado es con el secretario de Estado y que no entra en "asuntos que afecten internamente a su organización ni a cómo ellos puedan organizar su trabajo interno".
El arzobispado de Madrid ha señalado que la decisión sobre la inhumación de los restos de Francisco Franco atañe al Gobierno y a la familia, han señalado a Efe fuentes de la institución.
"El Gobierno en lo que ha quedado es en trabajar conjuntamente con la Iglesia para que los restos de Franco no estén en un lugar en el que se pueda producir ningún tipo de enaltecimiento, porque eso es ilegal y el Gobierno no va a consentirlo", ha reiterado.
Ha subrayado que con la modificación que se ha hecho de la Ley de Memoria Histórica esto queda "meridianamente claro".
El Gobierno quiere que la Iglesias tribute por inmuebles y actividades sin culto
Calvo también se ha referido a otros asuntos tratados con el Vaticano. El Gobierno quiere la Iglesia española tribute por aquellos inmuebles y actividades donde no hay culto y se ha encontrado para hacerlo posible con la comprensión de la Santa Sede, ha dicho la vicepresidenta.
La vicepresidenta trasladó ayer al cardenal Parolin que al Gobierno de Pedro Sánchez le parece "urgente" y "necesario" que la Conferencia Episcopal española acepte la fórmula de la Conferencia Episcopal italiana de 2012 en relación a las tributaciones.
La vicepresidenta ha explicado, en los pasillos del Congreso, que el número dos del Papa "entendió perfectamente" esta propuesta del Ejecutivo español y que ambos quedaron en ver "cuáles pueden ser las fórmulas" para materializarlo y "trabajarlas conjuntamente".
"Él entendió que las exenciones fiscales para los asuntos no relativos al culto no parece sostenible", ha recalcado, tras defender que esta línea de actuación forma parte de la reforma de la política fiscal que quiere acometer el Gobierno, en la que "no cabe que la Iglesia católica no tribute de manera razonable como lo hace al menos ya en Italia"